Por Joel Morales
El Informador
GRAND RAPIDS, MI
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Kamari Beeks y Iyesha Gibbs, ambos de 19 años de edad, aparecieron brevemente en la Corte del Distrito 61 el martes 14 de agosto, antes de tener sus audiencias de causa probable suspendidas.
Los abogados para Beeks y Gibbs, acusados de asalto con intento de cometer daños mayores y secuestro de un bebé respectivamente, solicitaron a la juez exámenes mentales, lo que la magistrada les concedió la petición.
La policía indicó que el 30 de julio Beeks apuñaló a Tyler Fender en el pecho, cerca de la esquina de la calle Cherry y avenida Grandville SW en Grand Rapids, y luego intentó apuñalar a su esposa.
La pareja, que aparentemente llevaba $800 dólares en efectivo para poner pagar un enganche de una casa de renta, decidieron ir a comer antes de entregar el dinero y cambiar su situación de desalojados cuando ocurrió el incidente.
Tyler les dijo a nuestros socios en FOX 17, que solo vio el reflejo del asaltante quien llevaba puesto un abrigo grueso y acolchado de invierno. En un instante, Beeks le metió el cuchillo y luego le apuñaló su brazo izquierdo.
En corte, Beeks no dijo nada excepto para afirmar que entendía los cargos en su contra y sus derechos. Estaba vestido en pijamas verdes de la Cárcel del Condado de Kent, y su brazo izquierdo estaba en una sortera.
Por otro lado Gibbs, quien enfrenta un cargo de secuestro por desaparecer con un bebé de 1 año de edad quien estaba bajo su cuidado, entró al mismo salón de corte, esposada de manos y pies, y una cadena con candado alrededor de su cintura.
Su audiencia frente a la juez fue similar, su abogado pidió un examen de competencia mental para su cliente, y determinar si la joven puede asistir en su propia defensa.
Fue el miércoles 1.° de agosto, que Gibbs, quien estaba cuidando al bebe desapareció de la casa con el mismo, para después ser hallada en la ciudad de Benton Harbor a unas 70 millas sur de la ciudad de Wyoming con el pequeñito salvo y sano.
Su madre Lakomia Gibbs les dijo a los medios de comunicación en la corte, que era injusto que su hija (Gibbs) estuviera enfrentando el cargo de secuestro, porque ha cuidado al bebé más de una vez, incluso durante las horas de la noche.
“No creo que debería estar en la cárcel, siento que debería estar libre porque le dijeron que podía cuidar al bebé durante la noche y luego cambiaron de mente”, dijo Lakomia Gibbs. “Están diciendo que ella se llevó al bebé y que lo secuestró, pero el bebé se le fue dado”, agregó
Justina Banks, una amiga de la familia, quien afirma conocer a la joven desde los 11 años de edad, le dijo a El Informador afuera de la corte que la joven nunca ha estado en problemas.
“Hoy venimos a la corte para la audiencia y su abogado ni siquiera se introdujo a nosotros”, explicó Banks. “No habló conmigo ni con su madre, en lugar dijo que tenía que saludar a los abogados y fiscales y otras personas adentro de la corte”, agregó.
Banks está molesta por la fianza de $50,000 mil dólares que le han puesto a Gibbs. “No le dan ese tipo de fianza a un depravador o a una persona que intentó matar a alguien”, argumentó.
La mujer indicó no saber porque la madre del bebé llamó a las autoridades, para reportar que la joven lo había secuestrado. Dijo que todo ha sido un malentendido, y que el hecho de que están juzgando a la joven, es una pérdida del dinero del estado.
Otra mujer, Wanda Banks, explicó que la joven no bloqueó a la madre de su Facebook, sino más bien su teléfono no estaba funcionando apropiadamente.
“Iyesha y la madre del bebé se conocen desde adolescentes cuando estaban en la escuela. “¿Me van a decir que si alguien me dice que yo puedo cuidar a su bebé, luego por la noche cambia de opinión y yo no me puedo comunicar con ellos, eso es secuestro?, preguntó Banks.
Si la joven es hallada culpable del cargo de secuestro o tentación infantil, y de ocultar al niño de su madre, podría recibir una sentencia de vida en prisión.
