“Tan fácil de usar como un cajero”, así describe la empresa estadounidense, American Rounds, sus máquinas expendedoras de municiones instaladas en las tiendas de estados como Texas, Alabama y Oklahoma.
Equipadas con tecnología de inteligencia artificial, las máquinas están adecuadas únicamente para venderle balas a aquel que las necesite para su arma.
La firma estadounidense describe su negocio como “la innovación en ventas de munición minoristas, automatizadas e inteligentes”.
Sus dispensadores automáticos están disponibles las 24 horas del día, los 7 días de la semana, ofreciendo a los clientes la posibilidad de comprar municiones en cualquier momento, “sin las limitaciones de los horarios de tienda ni las largas colas”. “Con American Rounds, tu munición está lista cuando tú lo estás”, promete la empresa en su página web.
Cabe resaltar que la tecnología incorporada en estos dispensadores incluye escaneo de tarjetas y software de reconocimiento facial, lo que permite verificar la edad del comprador y asegurar que la persona que utiliza la máquina coincida con la identificación escaneada para cumplir con las normas federales.
“Ubicadas en puntos estratégicos, nuestras máquinas son tan fáciles de usar como un cajero automático, lo que permite una transacción fluida que le permite volver a lo que más le importa en minutos”, detalla la empresa americana.
American Rounds describe que el objetivo de su negocio es “revolucionar la industria de las municiones, haciendo que las compras sean más sencillas, rápidas e inteligentes para todos”.
El porte de armas en Estados Unidos es un tema profundamente arraigado en la cultura y la legislación del país. La Constitución de los Estados Unidos garantiza el derecho de los ciudadanos a poseer y portar armas.
Este derecho ha generado un intenso debate sobre el control de armas y la seguridad, especialmente por los casos de tiroteos masivos en escuelas o establecimientos públicos.
De acuerdo con datos obtenidos por el medio CNN, “en lo que va de 2024 se han producido más de 200 tiroteos masivos, incluido el tiroteo después del desfile de celebración de la victoria de los Kansas City Chiefs en el Super Bowl”.
En muchos estados, obtener un arma de fuego es un proceso relativamente sencillo que implica principalmente ser mayor de 18 años y en algunos casos para armas de grueso calibre, se necesita ser mayor de 21.
Sin embargo, como las leyes varían de un estado a otro, en Alaska, Maine, Minnesota y Vermont a los mayores de 16 años se les permite comprar armas, siempre y cuando estén bajo supervisión.
Además, el proceso de obtención de armas requiere la verificación de antecedentes criminales. Para personas con reporte de adición a drogas, problemas mentales, reportes de violencia, entre otros, se les prohíbe la venta de armas de fuego.