
Ciudad de México, 24 may (ELINFORMADORUSA/EFE).-
Organizaciones por los derechos de la infancia en México, Guatemala, Honduras y El Salvador presentaron este viernes en la capital mexicana el Mecanismo de Protección Trasnacional de Niñas, Niños y Adolescentes en contextos de movilidad humana, que integra propuestas de niñas, niños y adolescentes especialmente aquellas que cuentan con alguna experiencia migratoria.
Las ONG indicaron que el Mecanismo busca promover la garantía de los derechos humanos de la niñez y adolescencia migrante con un abordaje integral, independientemente del contexto en que se encuentren, ya sea en tránsito, destino o retorno.
«Los flujos en la tendencia de la migración en México, Guatemala, Honduras, El Salvador sigue muy activa», dijo en su participación Tania Ramírez, directora de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
También, apuntó, están viendo esos flujos -sobre todo después de la pandemia- en Venezuela, Haití, Colombia, Ecuador, que empiezan a marcar la dinámica migratoria «y ya no solo se está buscando llegar a los Estados Unidos», señaló.
Ramírez citó datos de la Unidad de Política Migratoria, Registro e Identidad de Personas (UPMRIP), de la Secretaría de Gobernación de México en donde se apuntó que durante 2024 se reportaron 138.882 niñas, niños y adolescentes extranjeras en movilidad en México (47,5% mujeres y 52,5% hombres).
Además se registraron 108.444 eventos de niñez y adolescencia en «situación migratoria irregular».
También, apuntó que «a pesar de su alta presencia en los flujos migratorios, las niñas, niños y adolescentes suelen ser tratados como acompañantes de adultos, sin reconocimiento pleno de su individualidad ni de sus derechos como personas».
En busca de la unificación familiar
Elena Ruiz Bejarano, coordinadora Institucional de Promoción por los Derechos de la Niñez (Ciprodeni) de Guatemala, explicó que mediante sondeos en su país han detectado que «a los 15 años es cuando niñas y niños deciden irse de Guatemala», principalmente porque necesitan mejorar la economía de su familia o buscan la unificación familiar.
Además, «necesitan sentir que tienen una oportunidad de crecimiento económico fuera, porque en Guatemala no se les han dado las condiciones necesarias dentro de la economía local».
La desigualdad social
Wilmer Vasquez, director de la Coordinadora de Instituciones Privadas por las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos, (Coiproden) de Honduras, dijo que la «desigualdad social es la que obliga a cientos de miles a tener que abandonar nuestros países y buscar mejores condiciones de vida», muchas veces arriesgando su vida.
Expuso que ser niña, niño o adulto adolescente implica enfrentar múltiples desafíos de desarrollo, los cuales enfrentan junto a sus familias y esa «desigualdad social tiene un impacto en derechos fundamentales como la salud, la educación, la seguridad social».
Ana Georgina Ramos de Villalta, directora de la Red para la Infancia y la Adolescencia de El Salvador (RIA), recordó que el Mecanismo es una alternativa para articular los sistemas nacionales de protección entre países de origen, tránsito y destino.
Explicó que el perfil de las niñas, niños y adolescentes con experiencia migratoria que están participando en el proceso, relataron experiencias de abuso en la ruta que abarca origen, tránsito y destino, además de amenazas por inseguridades de los países.
«En el caso de El Salvador (…) a las niñas por su condición de niña (muchas) han sido amenazadas y tuvieron que huir por amenazas de las pandillas».
Villalta apuntó que «entre 30 y 40 millones de niñas, niños y adolescentes se encuentran en movilidad a nivel mundial. Esto representa un 14,6 % de la población migrante total».
En el acto se señaló que las medidas impulsadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como redadas, deportaciones aceleradas y cancelación de la aplicación CBP-One, ponen en alto riesgo a niñas, niños y adolescentes migrantes, al exponerlos a detenciones, separación familiar y procesos sin protección.