Los Ángeles, 9 feb (ELINFORMADORUSA/EFEUSA).- California debe reforzar la seguridad laboral de los trabajadores latinos para poder tener éxito en su campaña de defensa de la comunidad migrante y así convertirse en un ejemplo a seguir en todo el país, advirtieron hoy expertos y activistas.
Reunidos en Sacramento, capital de estado, promotores de la seguridad en lugares de trabajo temen que la retórica del presidente Donald Trump sobre los inmigrantes pueda influir en la actitud de sus empleadores y, por ende, hacer que se eleve aún más las tasas de muertes y accidentes de latinos en sus centros de labores.
«Con su mensaje de odio esta descalificando el trabajo de los inmigrantes y esto repercute en los empleadores que no están cuidando la seguridad de ellos», señaló María Elena Durazo, vicepresidenta del Sindicato de Trabajadores UNITE-Here y quién participó hoy en la conversación «Inmigrantes Latinos: Muertes, Negaciones y Discriminación».
Datos de la Oficina Federal de Estadísticas Laborales muestran que en todo el país 903 hispanos murieron en accidentes de trabajo en 2015, el número más elevado en ocho años.
«Con esta nueva retórica los trabajadores hispanos están en mayor riesgo. Para las compañías es más barato pagar un muerto que incrementar la seguridad de sus empleados y esta idea va a tomar más impulso», aseguró en declaraciones a Efe Bernardo de la Torre, expresidente de California Applicants Attorneys Association (CAAA).
«California está luchando por los inmigrantes y los indocumentados, pero si no defiendes su seguridad en el trabajo esa lucha no tiene sentido», agregó.
En este estado, el 46 % de las fatalidades registradas en 2015 correspondieron a trabajadores de origen latino, aunque un año antes la cifra fue superior: Los hispanos fueron víctimas del 59% de todos los accidentes laborales.
En Nueva York, de acuerdo al reporte «Deadly Skyline» elaborado por el Comité de Salud Ocupacional y Seguridad, la tasa de mortalidad ha aumentado el 40% entre los años 2011 y 2015 en el sector de la construcción. Las caídas son la principal causa de muertes y representan el 49 % de los decesos a nivel estatal y el 59 % en la ciudad.
Asimismo, en todo el país, de acuerdo a datos de 2013 los mexicanos encabezan la lista por nacionalidades de los inmigrantes que fallecen en el trabajo, al constituir cuatro de cada 10 trabajadores extranjeros que perecen en accidentes laborales.
«Hay hispanos que terminan dañados de por vida y muchos terminan en la calle como desamparados por un accidente de trabajo, otros deben volver a sus países a que sus familiares se hagan cargo de ellos», amplió De la Torre.
La colombiana Sandra Barrera es una de las que hace parte de la estadística. La inmigrante sufrió un accidente de trabajo en diciembre de 2012 cuando un compañero dejó caer sobre su espalda las cajas que movilizaba en un montacargas.
Durante más de cuatro años ha luchado por un tratamiento adecuado para su padecimiento, pero el seguro de la compañía no ha querido responder y a estas alturas espera que el caso se resuelva en una corte.
«Nunca he recibido un solo peso. Pese a que el médico no me dejaba trabajar, el seguro no me dio un peso y tampoco me autoriza exámenes, ni la cirugía. Sino es por mi familia yo no sé qué hubiera hecho», relata Barrera.
Para Laura Polstein, del Centro Legal de la Raza, las nuevas directrices de la administración Trump ponen en riesgo a la fuerza laboral menos protegida, los trabajadores indocumentados.
«Ante el riesgo de una deportación, muchos trabajadores se quedarán callados frente a cualquier accidente en el trabajo o no van a exigir la seguridad», advirtió.
La Administración de Salud y Seguridad Ocupacional federal encontró infracciones a los códigos de seguridad en dos tercios del total de inspecciones que llevó a cabo en Nueva York en el año 2014. En el 87 % de esos lugares infractores se registró algún accidente laboral ese año, y en 2015 la cifra aumentó al 90 %.
CAAA, junto a la Unión de Trabajadores del Campo (UFW), el Fondo México Americano de Defensa Legal y Educación (MALDEF, en inglés), el Centro Laboral de la Universidad de California Los Ángeles, entre otras, pidieron que California sea líder en seguridad laboral, en especial en las industrias agrícola y construcción, donde más inmigrantes se emplean.
«¿A qué vienen los inmigrantes?. A trabajar, y no es justo que den la vida por unos dólares. Debemos protegerlos y que estén seguros en sus trabajos, sin importar su estatus migratorio», aseveró De La Torre.