La ACLU demanda en una carta a la Universidad Estatal de Michigan cambiar una política relacionada con conducta sexual de sus estudiantes(Foto Ilustrativa FR).
Por Edgar Castro/El Informador
DETROIT, MI (ELINF).- La Unión Estadounidense de Libertades Civiles de Michigan y el Proyecto de Derechos de la Mujer de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles enviaron una carta a la Universidad Estatal de Michigan (MSU por sus siglas en ingles), instando a su administración a retirar una política provisional que requiere que los estudiantes que presentan denuncias de conducta sexual inapropiada se sometan a un interrogatorio realizado personalmente. por sus presuntos abusadores.
Una carta liberada por la ACLU señala que está comprometida con un proceso justo, tanto para aquellos que alegan que han sido acosados o asaltados sexualmente, como para aquellos acusados de tal conducta. El debido proceso y la equidad fundamental requieren un interrogatorio en los casos de educación superior donde es posible una disciplina seria. Pero a los estudiantes acusados de abuso sexual no se les debe permitir realizar un interrogatorio personal del demandante. El interrogatorio debe ser realizado por representantes capacitados, no por los propios estudiantes.
«La Universidad no debería exigir a quienes alegan violencia sexual que se sometan a un interrogatorio realizado por el mismo acusado de haber cometido el asalto», indicó Bonsitu Kitaba, subdirector legal de la ACLU de Michigan. «Las únicas personas que realizan interrogatorios en estas audiencias muy difíciles deben ser representantes con capacitación profesional».
La carta de la ACLU advierte que una política en la que aquellos que supuestamente se hayan involucrado en asalto o acoso cuestionen personalmente al demandante corre el riesgo de disuadir las quejas, traumatizar a los que continúan con las denuncias y crear un ambiente hostil en el campus, todo en violación del Título IX. La mayoría de las universidades no requieren que los interrogatorios sean realizados por las propias partes. La carta insta a la Universidad a adoptar una política que cumpla con el Título IX y el debido proceso, al proporcionar el interrogatorio por parte de aquellos capacitados en la práctica.
«La política de la Universidad de Michigan es innecesariamente traumatizante para quienes denuncian agresiones sexuales y podría disuadir a las víctimas de presentarse», señaló Sandra Park, abogada del personal del Proyecto de Derechos de las Mujeres de ACLU. «También podría contribuir a un ambiente hostil en el campus en violación del Título IX», concluyó.