Por Lee Marvin Abogado de Inmigración
Recientemente, vino un cliente a preguntar acerca de cómo obtener un divorcio. Su primera pregunta era si él podía conseguir un divorcio en los Estados Unidos, ya que él no tiene un estado de inmigración legal. La respuesta es sí, él puede divorciarse aquí en los Estados Unidos, independientemente de su condición migratoria ya que las leyes de familia son aprobadas por el Estado, y no el gobierno federal, el estado migratorio no es importante.
Luego me dijo que su pareja incluso no vive aquí en los Estados Unidos, puesto que ella no le quiso seguir aquí cuando el salió de su país. Él vino aquí a buscar trabajo para poder enviar dinero a su familia. Quería saber qué podía hacer para solucionar este problema aquí, ya que él salir de Estados Unidos y viajar a su país para divorciarse, sería un riesgo muy grande para volver a entrar. Si fuera a su país, él probablemente no sería capaz de volver. El también pregunto varias cosas: ¿Podría él divorciarse sin ella en los Estados Unidos? ¿Qué pasa si ella no es capaz de venir a Michigan a responder al divorcio? ¿Qué pasa si ella se niega a permitir el divorcio independientemente de su presencia en el país?
La respuesta a todas estas preguntas es sí, él puede divorciarse de ella aquí en los Estados Unidos, sin su presencia física, y por supuesto también hay pasos en el proceso para protegerla a ella. En Michigan se tiene lo que se denomina un divorcio «sin culpa» donde el demandante (la persona que presenta el divorcio) no tiene que probar algunas cosas para justificar la acción, pero sólo tiene que efectuar argumentos específicos en la solicitud. La ley de Michigan entonces permite al demandante seguir adelante con el proceso, siguiendo estrictas normas de procedimiento. Este proceso existe para proteger a ambos lados de la controversia y permitir que un matrimonio legalmente constituido pueda ser terminado por el bien de ambas partes. Sería equivocado para el gobierno impedir a las personas a avanzar en sus vidas a causa de la falta de cooperación de uno de los cónyuges.
Aunque existe el proceso para resolver estas y muchas otras cuestiones de derecho de familia, son muy técnicos y requieren de alguien con la experiencia y los conocimientos necesarios para navegar por el sistema. Más que esto, es crítico para su abogado el poder evaluar cómo un divorcio afectaría su estado de inmigración o un proceso en curso. Independientemente si la ley permite el divorcio o no, a menudo hay consecuencias muy graves de inmigración para todos los asuntos relacionados con el sistema judicial.
Si usted o un miembro de su familia tiene alguna pregunta acerca de las cuestiones de derecho de familia y cómo afectara su proceso de inmigración, póngase en contacto con nuestra oficina al 616-450-2981. Lee L. Marvin es un abogado especializado en asuntos de inmigración y criminales.