Miami, 8 feb (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
gentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) detuvieron a un migrante guatemalteco que fue puesto en libertad por el Departamento de Correcciones de Illinois y sobre el que se había emitido un pedido de detención, en otro capítulo de desencuentro entre las dependencias locales y esa agencia federal.
En un comunicado difundido este viernes, ICE lamentó que el Departamento de Correcciones de Illinois, que opera el sistema carcelario estatal, no respetara la orden de detención («detainer») emitida contra Yoni Cruz-López, de 24 años, y quien fue arrestado por agentes de migración el miércoles en una estación de tren en la ciudad de Chicago (Illinois).
Chicago es una de las más de 500 ciudades, condados y estados que se han declarado «santuario» para los migrantes, y por tanto sus policías y otras agencias tienen prohibido colaborar con la identificación, detención y deportación de indocumentados, que son tareas del Gobierno federal.
«Este arresto debió haberse realizado en los confines seguros de una cárcel» y no en una terminal terrestre, «posiblemente poniendo en riesgo a los viajeros», manifestó Robert Guadian, director local de la oficina de Operaciones de Detención y Deportación (ERO, en inglés), tras criticar las políticas santuario.
Cruz-López, residente en la localidad de Mt. Prospect, al noroeste de Chicago, tenía tres condenas por conducir con niveles de alcohol por encima de lo permitido y en 2017 un juez de migración ordenó su deportación en una audiencia en la que el guatemalteco no se presentó.
En enero del año pasado, ICE envió al Departamento de Correcciones de Illinois una orden de detención contra el migrante, pero, según el comunicado, la entidad cortó comunicaciones con la agencia federal y Cruz-López fue liberado del Centro Correccional de Vandalia el pasado 5 de febrero.
Una solicitud de detención de ICE es un pedido por escrito para que una cárcel local u otra agencia policial detenga a una persona un tiempo adicional luego de la fecha de su liberación, lo que concede a la agencia federal más margen para asumir la custodia federal del migrante de cara a su deportación si es que corresponde.