Sin duda alguna como mujeres y futuras madres no nos imaginamos incursionar en el mundo de la maternidad estando sin nuestras parejas, tener el apoyo de nuestro esposo a un lado es fundamental e indispensable para algunas mujeres, sobre todo si eres una madre primeriza de tan sólo 18 años.
Tal es el caso de esta joven, su historia de amor es realmente conmovedora Hannah Mongie y Kaden estuvieron juntos en todo momento.
“Fuimos a la primaria juntos, siempre fuimos mejores amigos, en la secundaria él era quien espantaba a todos los chicos de mi lado, era realmente encantador. Cuando por fin se atrevió a pedirme que fuese su novia yo me sentía muy feliz, vivimos muchas aventuras juntos, mis mejores recuerdos los tengo a su lado”.
Luego de meses de relación Hannah se entera de que está embarazada y aunque Kaden se emociono con la noticia en lo único que pensaba era en la opción de poner al pequeño en adopción.
“Nosotros no habíamos terminado nuestros estudios, no teníamos ningún tipo de trabajo, esto lo hicimos pensando en nuestro pequeño. ¿Qué vida le podíamos ofrecer?”.
Luego de varias semanas de discutirlo ambos decidieron que la adopción era la mejor salida, pero lamentablemente nadie sabe cuando Dios decide llamarnos y tristemente fue momento que Kaden dejara este mundo.
Una mañana como cualquier otra Hannag recibió la llamada que cambio su vida.
“Kaden murió en su habitación, solo y sin ningún motivo aparente. Su corazón simplemente dejo de latir”.
Hannag estuvo 2 meses en su habitación, no hablaba con nadie y a duras penas comía. Fue allí cuando se aferro más a su hijo, era lo único que le quedaba del gran amor que existió entre Kaden y ella.
“La palabra adopción ya no estaba en mi cabeza, yo quería estar con mi bebé y darle todo el amor que Kaden y yo podíamos darle”.
Pero todo esto fue cambiando cuando el embarazo ya estaba muy avanzado y se dio cuenta que no iba a poder sola, fue allí cuando decidió dar a su pequeño en adopción.
Taggart nació siendo un bebe sano y hermoso, Hannag se sentía realmente feliz y aunque no pudo estar mucho tiempo con su hijo en brazos ella decidió grabarle un pequeño vídeo donde le explicaba el por qué de esa decisión tan dura y difícil para ella.
“Hola mi pequeño amor, quiero que sepas que mami te amo desde el primer momento en que supe que venias en camino, fuiste mi refugio durante unos meses muy dolorosos, me ayudaste a salir adelante y a hacerme sentir viva nuevamente. Quiero que sepas que tu papá se sintió plenamente feliz el día que pudo escuchar tu corazón latir por primera vez. Tanto así que dos días después de escuchar tu corazón el suyo se detuvo”.
Esta madre busco muy bien quienes serian los padres adoptivos de Tagg y sin duda encontró a los mejores. Una pareja muy unida y llena de amor, Brad y Emily fueron los escogidos y decidieron implementar una adopción abierta, en donde Hannag tiene el derecho de ver a Tagg 1 vez al mes y así poder seguir presente en su vida.
No olvides compartir esta publicación y déjanos tu comentario para esta madre que tomó una de las decisiones mas difíciles del mundo pero todo lo hizo pensando en el bienestar de su pequeño.