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Oficialmente fue el regreso a clases tanto en EEUU como en México y este año a diferencia de otros tiene gran expectativa y los ojos están puestos sobre el ojo del huracán, el cual es la violencia.
Y es que, el año pasado en todo el país de las barras y las estrellas, los tiroteos dentro de las escuelas sembraron el terror y el pánico dejando a la gente realmente horrorizada y con temor de mandar a sus hijos a las escuelas.
Claro está que los niños y jóvenes deben estudiar, pero los padres tienen mucho temor de que la historia como en la escuela de Texas se vuelva a repetir. Por otra parte este caso es un vivo ejemplo de que deben implementar vigilancia más segura en las escuelas para que esta historia no se vuelva a repetir.
Todos los padres saben lo difícil que es mandar a nuestros hijos a la escuela cada día, sin saber si será el último día que los vamos a volver a ver con vida ya que los tiroteos ya no son solo en las calles entre los delincuentes sino hasta en las escuelas, actos que son repudiables.
Y en México ni se diga, la inflación representó un duro golpe a los padres quienes tuvieron que ingeniárselas con precios inflados y varios hijos para abastecer no solo de útiles y mochilas, sino que también de uniformes, calzado y las inscripciones del colegio.
Sin duda dos cosas que aunque sean diferentes han dificultado para muchos el regreso a clases.