Por Edgar Castro/HAZEL PARK, MI
Un maestro enfrenta un cargo grave después de que la policía informara que ordenó el cierre de la escuela secundaria Hazel Park la semana pasada por una amenaza de bomba. El reporte generó la movilización de cerca de 10 unidades K-9 para barrer el edificio. Originalmente, se creía que el profesor vio una amenaza de bomba en un papel y no lo informó.
De acuerdo con la superintendente de las escuelas de Hazel Park, Amy Kruppe, la amenaza de bomba de la semana pasada fue dura para los estudiantes, especialmente porque parece ser una tendencia. “Las amenazas que continúan ocurriendo en las escuelas son traumatizantes para los niños y no creo que nunca te dejen de afectar seriamente”, comentó Kruppe.
Cuando la amenaza se informó por primera vez alrededor de las 6:30 p. m. del jueves de la semana pasada, la policía de Hazel Park respondió con toda su fuerza y trajo rastreadores de perros y varios oficiales. Lo que hace que este incidente sea diferente es que involucró a un maestro, según el Departamento de Policía de Hazel Park. Hasta el momento se presume que Paul Jacobs, de 40 años, de Livonia, colocó la nota en el salón de clases para que los estudiantes la encontraran.
El maestro comentó a las autoridades que encontró la nota en un cuaderno. Pero según el jefe de policía, los investigadores creen que él estaba detrás y lo plantó intencionalmente, con la esperanza de que se informara y la escuela se cancelara al día siguiente.
La policía detalló que la nota fue encontrada más tarde por un empleado de la escuela. Jacobs está acusado de hacer una amenaza intencional de un acto de violencia contra una escuela, empleados o estudiantes. Este es un delito menor de un año. Se detalló que Jacobs fue procesado el 4 de febrero y su audiencia previa al juicio está programada para el 28 de febrero.
