“Juez mantiene fianza de $1 millón”
Por Joel Morales
El Informador
GRAND RAPIDS, MI
[email protected]
Atado a una silla de ruedas, resultado de heridas que sufrió en una persecución policial en marzo que cobró la vida de su primo, David Torrez, de 15 años, y la de una estudiante de la universidad Calvin, Tara Oskam, Alex Torrez, de 17 años, se presentó en la Corte de Circuito 17 en Grand Rapids el pasado viernes, donde él se declaró “No culpable” de dos cargos de homicidio en 2do grado.
Predominando su primera audiencia en la corte de circuito frente al juez Paul Sullivan, el abogado de Torrez le pidió al magistrado que redujera su fianza de $1 millón, diciendo que su familia no tenía los medios para poder pagar la alta cantidad, llamándola “inalcanzable”. Por otra parte, añadió que, si se redujera la fianza, el joven Torrez pudiera ayudar más en su defensa.
“Aunque este es un crimen muy, muy serio, no es una en que el señor Torrez (manera formal de referirse a un litigante en los procedimientos judiciales) salió y se adueñó de un arma o de manera intencional trató de herir a alguien”, dijo el abogado. “Mi cliente no tiene un récord criminal, su familia radica en la comunidad y es un ciudadano americano. No tiene que preocuparse de que vaya a salir del país, y no tendríamos problemas en que se sometiera a monitoreo electrónico”, agregó.
Sin embargo, el fiscal argumentó que Torrez, quien tenía 16 años de edad cuando transcurrió el choque en el que manejaba a alta velocidad, más de 100 millas por hora por la Calle 52, con la policía detrás de él antes del impacto fatal, había manejado un mínimo de cuatro veces sin licencia de conducir y que era una amenaza a la comunidad.
“No tengo ninguna confianza en que su familia va a poder prevenirlo de manejar de nuevo o que vaya a respetar las leyes”, contradijo el fiscal. “Es una amenaza a la comunidad y la fianza de $1 millón es apropiada”, agregó.
Luego de oír del abogado de Torrez y del fiscal, el juez Sullivan dijo que, considerando los cargos que estaba enfrentando, sí había razón por la que el joven pudiera huir y ordenó que la fianza de $1 millón se quedara.
Mientras era escoltado de la audiencia por un agente de seguridad de la corte, su madre, María Cerda, y su abuela lo saludaron con la mano.
Al ser hallado culpable de las muertes de su primo y de Osakam, la pena máxima que pudiera recibir Torrez es de cadena perpetua u otro término de años. El juez también podría imponer una sentencia consecutiva por el delito de operar un vehículo sin licencia que resultó en homicidio.