¿Alguna vez te has preguntado cómo la gente rica o los ejecutivos llegaron a la cima? Es una pregunta común hoy en día, y sin embargo, mucha gente no ha podido imitar lo que estas personas exitosas están haciendo, ni siquiera modelarlo. Algunas personas llegaron a la cima a una edad muy temprana debido a su ardiente deseo de desarrollar y optimizar su pasión en la vida, mientras que otros aprendieron a luchar desde cero y tuvieron éxito, pero se quemaron a los treinta o cuarenta años.
El resultado final, sin importar la edad que elegimos para comenzar a trabajar enfocados al éxito, ya sea en la juventud o en la vejez, obtendremos el triunfo de acuerdo al nivel de nuestro enfoque, actitud y el esfuerzo que invertimos. Entonces, si ponemos en duda la fórmula para lograr el éxito, el resultado puede ser «éxito debido al miedo a quedarse atrás» o «éxito relacionado con el miedo a perder el apego social». Cualquiera que sea nuestro resultado esperado, no debemos asociar negatividad en el proceso.
Antes de considerar una fase de «resolución», debes comprender vívidamente que «todo tiene su propio ritmo»: las cosas caerán naturalmente en su lugar designado una vez que nos permitamos aceptar y reclamar el «sentimiento de alcanzar un objetivo definido». Esta es la ley de la atracción, un fenómeno natural que se produce universalmente en base a la energía o creencia que usamos mientras imaginamos nuestros sueños o visiones en la vida.
Sí, podemos usar un catalizador o jugar con factores controlables para alcanzar el éxito, o podemos artificialmente acelerar el proceso. Sin embargo, puede dar lugar a una pausa no planificada de nuestro viaje hacia un objetivo porque todavía puede estar o no «maduro».
Una resolución, si caes atrapado en tu ilusión autodestructiva; para rectificar cosas – SIEMPRE recuerda esto: «Lo que tu mente puede concebir y creer, lo logrará dentro de 3 a 5 años. Haz de la felicidad el centro de tus metas y visión. Transpórtate a tu estado óptimo a través del lado más brillante de la vida, evoluciona y crece. ¡Lo lograrás! ¡Felicidades! ¡Que tengas un gran día!
