Washington/Ciudad de México, 8 may (EFE News).-
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mantuvieron este viernes un encuentro virtual en el que acordaron abordar la causas de la migración desde Centroamérica, como la deforestación y el desempleo.
Poco después de la reunión, la portavoz de la Vicepresidencia estadounidense, Symone Sanders, explicó en un comunicado que ambos coincidieron en trabajar juntos con el fin de «establecer una colaboración estratégica para abordar las causas de raíz de la migración de los países de la región del Triángulo Norte», en referencia a Honduras, Guatemala y El Salvador.
En ese sentido, la portavoz precisó que la iniciativa contempla que EE.UU. y México aprovechen su experiencia y recursos para afrontar una serie de retos, «incluyendo la falta de empleo, el acceso limitado al mercado, y la deforestación y la inestabilidad regional ocasionadas por el cambio climático».
ATRAER INVERSIONES CON «SEMBRANDO VIDA»
Antes de la reunión telemática, López Obrador había manifestado a los periodistas que esperaba que la cita de este viernes con Harris sirviera para atraer inversiones hacia Centroamérica con su programa estrella de reforestación, Sembrando Vida.
En ese sentido, había adelantado que iba a explicar con «bastante detalle» su propuesta de exportar dicho programa para «invertir» en Centroamérica para sembrar árboles.
En México, el proyecto consiste en sembrar un millón de hectáreas y en él trabajan ya 420.000 sembradores.
Sanders apuntó que durante su conversación Harris y López Obrador hicieron hincapié en la relación bilateral y en la necesidad de trabajar juntos en la recuperación de la pandemia de covid-19, la construcción de «una resiliencia climática» y la expansión de oportunidades económicas y de cooperación en seguridad.
El comunicado agrega que Harris destacó el compromiso de su país para trabajar con México con el fin de impulsar el desarrollo del Triángulo Norte y el sur mexicano, proteger los derechos de los trabajadores para que se organicen en sindicatos y expandir las oportunidades de negocio.
Con ese objetivo EE.UU. ha desarrollado un paquete de medidas, que abarca misiones comerciales y de desarrollo empresarial a la región.
Por otro lado, según Sanders, ambos altos funcionarios expresaron su deseo en progresar en los esfuerzos bilaterales contra el tráfico ilegal de personas, entre los que figura el intercambio de información y expertos para garantizar la seguridad en la frontera común y promover la protección de los derechos humanos.
UNA CHARLA «AMISTOSA»
Tras el encuentro, López Obrador calificó de «amistosa» la charla con Harris.
«Conversamos en términos amistosos con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris. Estamos comprometidos a trabajar juntos para buscar medidas eficaces, humanas y justas al fenómeno migratorio», afirmó el mandatario en Twitter desde el Palacio Nacional.
En su mensaje, López Obrador compartió el comienzo del encuentro virtual en el que la vicepresidenta estadounidense lo instó a abordar las causas de la inmigración desde los países del Triángulo Norte.
Harris inició la reunión subrayando que está en el interés de ambos países «proporcionar un alivio inmediato al Triángulo Norte» y tratar «las causas de raíz» de la inmigración.
«La mayor parte de la gente no quiere dejar sus casas y cuando lo hacen es a menudo porque huyen de algún peligro o se ven forzados a marcharse porque no hay oportunidades», remarcó la vicepresidenta, máxima responsable de la Casa Blanca de asuntos migratorios.
Harris animó a López Obrador a continuar trabajando de manera bilateral y multilateral sobre inmigración, además de subrayar que EE.UU. defiende un enfoque internacional y global.
«Nuestro enfoque es trabajar con instituciones internacionales, con naciones de todo el mundo, el sector privado y organizaciones comunitarias», detalló Harris, quien también pidió luchar juntos contra la violencia, la corrupción y la inmunidad.
Aparte de la inmigración, Harris citó otros «desafíos» para ambas naciones como la covid y sus repercusiones económicas, y afirmó que la colaboración con México no puede ser más importante en la actualidad.
UNA HISTORIA COMÚN PROFUNDA Y COMPLEJA
«No es necesario decirlo pero lo haré, México es nuestro vecino más próximo y, por supuesto, compartimos una frontera, pero también los valores de dignidad y respeto. Compartimos vínculos familiares y de amistad, y también compartimos una historia larga, profunda y compleja», señaló.
En su turno de palabra, López Obrador recordó que ambos países comparten una frontera de unos 3.000 kilómetros de largo, con lo que necesitan entenderse, más que pelear.
Y evocó una frase que le dijo a Biden durante la reunión virtual que mantuvo con él a principios de marzo, una cita del dictador mexicano Porfirio Díaz (1884-1911) que lamentaba: «Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos».
López Obrador consideró que, como ahora las relaciones están mucho mejor, se puede decir que «México está cerca de Dios y no tan lejos de Estados Unidos», lo que desencadenó las risas de los presentes.
«Ahora podríamos decir, porque son mucho mejores las relaciones, ‘Bendito México, tan cerca de Dios y no tan lejos de Estados Unidos», acabó.
Adelantó que hablarían de una «propuesta específica» que puede ser «conveniente» para combatir la migración, en referencia al programa Sembrando Vida, que busca expandir con apoyo de EE.UU. a Guatemala, Honduras y El Salvador.
En estos países, ya se aplica esa iniciativa mexicana, pero con recursos muy limitados.
Harris tiene previsto visitar México el próximo 8 de junio, en una gira que la llevará también a Guatemala.
La región vive una fuerte ola migratoria desde hace meses tras un 2020 marcado por la pandemia, las catástrofes naturales y la llegada del demócrata Joe Biden a la Casa Blanca.
El número de migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza de EE.UU. ha estado creciendo desde hace meses y saltó de 101.028 en febrero a 172.131 en marzo, su mayor nivel mensual en dos décadas.