Por Joel Morales
El Informador
WYOMING, MI
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Desde que Juan Carlos Buendía Villalpando, de 28 años de edad, originario de Agua Gorda, San Luís Potosí, México, perdió la vida en un accidente automovilístico en la cuadra 2400 de la avenida S. Division, el miércoles, 10 de mayo, las amistades de su esposa, madre de tres niños de 9, 5 y 2 años de edad, han estado realizando actividades para recaudar fondos para mandar sus restos a su tierra natal.
El jueves, 18 de mayo, y al cierre de esta edición, integrantes de El Informador junto con La casa del Pollo Loco en la avenida Clyde Park SW, Sara Ocampo de State Farm y El Toro Bravo realizaron un evento de lavado de carros para apoyar a Alondra Gamboa Ochoa, viuda del difunto quien le dijo a El Informador que el deseo de su fallecido esposo era de ir a México a ver a su madre, la cual no había visto en 12 años.
Al llegar al evento, las primeras personas que vimos fue a Jennifer Loredo, de 16 años de edad y Raquel Martínez, de 18, quienes alzaban unos cartelones al aire sobre sus cabezas, avisándole a los conductores por la avenida sobre el evento, de inmediato vimos a nuestra gente apoyando.
Ángel Serrano, de 20 años, de Grand Rapids y Francisco Tun, también residente de la ciudad de Grand Rapids y oriundo de Quiche, Guatemala, se encontraban lavando los carros que entraban al estacionamiento de La casa del Pollo Loco, a mano.
Cuando le preguntamos a Tun, qué lo había conmovido para unirse a la causa, el hombre guatemalteco dijo que uno nunca sabe lo que puede ocurrir en el mañana y que es algo que le pudiera pasar a cualquiera.
De su parte, Idalia Tinoco, propietaria de La casa del Pollo Loco, de Grand Rapids, nos dijo que el hecho de que uno vivió con tanta carencia, y que ahora tiene el poder para ayudar a alguien más, es algo que debería hacer.
“Si Dios nos da la bendición, es para bendecir a otros”, dijo Tinoco.
Mientras observábamos a los carros llegar y salir del evento, también tuvimos la oportunidad de conocer a Katty Nguyen, la propietaria de Oaxaca City Nails, un negocio del arreglo y pintado de uñas ubicado al norte del restaurante mexicano, quien, al enterarse de la actividad que se llevaba a cabo a una distancia corta de su negocio, salió y depositó su donación en una caja en el evento, que tenía una fotografía del hombre mexicano fallecido junto con su familia.
“Cuando tengan una necesidad pueden venir a visitarme, que a mí me gusta ayudar”, nos dijo Nguyen, antes de regresarse a su negocio de uñas.
La señora Alondra Gamboa Ochoa nos dijo que son aproximadamente $10,000, lo que necesita recaudar para poder mandar el cuerpo de su fallecido esposo a México, donde estará más cerca a su madre y donde ella ahora va a poder hablar con él y visitarlo en el panteón.
