Opinión: cada editorial El Informador
En esta ocasión hablaremos de un tema que es muy doliente y cada vez más frecuente en la sociedad, se trata del abuso sexual a menores por parte de los padrastros.
El convertirse en padrastro puede generar dos tipos de experiencias muy distintas, por un lado, podría convertirse en una experiencia gratificante y satisfactoria, pero por otro lado podría convertirse en una experiencia muy delicada y desagradable al dar pie a delitos de abuso sexual a los miembros de la familia.
Se supone que la idea de casarse con una persona que ya tenía hijos es para darse la oportunidad de compartir su vida con ella y sus hijos, para construir relaciones y establecer un vínculo especial, en este sentido un padrastro puede convertirse en un mentor amado y respetado.
Lamentablemente en muchos casos esto no sucede y lejos de convertirse en una sana relación se convierte en una relación desvirtuada de la realidad la cual afecta directamente a los menos culpables “los niños” para los cuales la figura del padrastro lejos de convertirse en algo positivo suele convertirse en un “monstruo”.
Últimamente el abuso sexual de hijastros o hijastras se a vuelto más común, acción que como medio de comunicación tachamos y reprobamos, además de que va en contra de los valores que debe promover la familia.
Existen a nivel mundial muchos casos en los cuales los padrastros han enfrentado la justicia y se les ha dictado merecidamente una sentencia, una victoria con sabor amargo para las madres y familiares porque lamentablemente el daño ya está hecho y los niños ya recibieron un grabe trauma del cual tal vez nunca puedan recuperarse.
Como periódico nuestro deber es informar y alertar de los riesgos a los que conlleva esto y exhortamos a todas las madres de familia que en su derecho de rehacer su vida presten mucha atención y pongan especial cuidado de a quien llevan a sus hogares, pero sobre todo que reflexionen en que antes de ser esposas son madres.
Este tipo de acciones tan brutales se pueden evitar, si ven alguna señal que las ponga en alerta por favor no duden en denunciar antes de que algo mayor suceda, cuide la integridad y bienestar de sus hijos.