Por Héctor Loya/GRAND RAPIDS, MI
El jefe de policía de Grand Rapids, Eric Winstrom, cumplió el martes su marca de un año como el jefe de policía de la ciudad.
«Me siento muy orgulloso de ser el jefe aquí, pero soy muy afortunado con los oficiales y despachadores y el personal civil que trabaja aquí», declaro el jefe Winstrom.
Dentro de los desafíos principales en su primer año fue la muerte de Patrik Lyoya, la cual marco un primer desafío al enfrentarse con la comunidad de color en Grand Rapids por las manifestaciones que se realizaron pidiendo justicia.
«Creo que probablemente el mayor logro individual es guiar al departamento a través del momento difícil después del tiroteo de Patrick Lyoya. Fue un esfuerzo de todo el equipo. Yo era nuevo cuando sucedió y confié en el personal de comando, que tiene mucha experiencia allí», explicó Winstrom.
Otro de los retos que ha enfrentado como jefe es el tener que ocupar puestos vacantes las cuales al momento son 30 y a pesar de que son muy optimistas de que van a hacer grandes avances, el reclutamiento este año ha sido bajo
Otro punto es la cantidad de armas ilegales incautadas por los oficiales. En 2021, los oficiales sacaron 575 armas de las calles y en 2022 hubo 527.
El crimen entre los jóvenes es un problema creciente, con tiroteos, robos y asaltos. Los datos recientes de la ciudad muestran que la cantidad de robos de vehículos motorizados en general aumentó de 908 en 2021 a más de 1,400 el año pasado, números que Winstrom espera reducir en 2023.
El jefe dice que tienen programas deportivos continuos durante el verano y que planea tener un papel más activo con el Boys and Girls Club. Winstrom agrega que la comunidad tendrá un papel activo en lo que se refiere al bienestar de los jóvenes de la ciudad.
El jefe también dice que quiere aumentar la cantidad de trabajadores sociales junto con los oficiales. El programa piloto muestra que los trabajadores sociales con licencia pueden acceder a información médica que los oficiales no tienen.