Búfalo,EUA.- La corriente del río Niágara se caracteriza por su fuerte corriente por lo que abundan los carteles de “Prohibido arrojarse al agua”. Sin embargo, no todos respetan la indicación, como le ocurrió a estos dos hombres, cuya imprudencia les costó la vida.
Un hombre pretendía recoger un tronco que flotaba para hacer muebles, por lo que otro se ofreció a buscarlo. Se metió en el río, pero ya no pudo salir.
Ante la impotencia de quienes observaban la peligrosa situación, el primero se tiró al agua para rescatarlo, pero la desesperación del segundo acabó sumergiendo a ambos hasta morir.