Houston (TX), 26 ene (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
La doctora Amy Cohen, directora ejecutiva de Every Last One, organización que supervisa el cumplimiento por parte del Gobierno de un acuerdo judicial sobre el trato a los menores migrantes, dijo a Efe que la joven, cuyo nombre no ha transcendido, solicitará asilo en Guatemala porque «teme regresar a Honduras».
La joven se encuentra con sus hijas, de 6 años y 18 meses de edad, en un refugio en Ciudad de Guatemala, donde pudo comunicarse con su esposo, quien vive desde hace un año en EE.UU.
Por medio del acuerdo que firmó el Gobierno de EE.UU. con Guatemala en julio de 2019, las autoridades del país centroamericano aceptan a solicitantes de asilo de Honduras y El Salvador.
La madre y las niñas, quienes huyeron de Honduras en septiembre tras ser amenazadas por pandillas, fueron detenidas en diciembre por la Patrulla Fronteriza tras cruzar la frontera ilegalmente y fueron trasladadas al centro de detención Donna, cerca de McAllen, en Texas.
Cohen, consultora sobre trauma e inmigración, explicó que la madre «nunca tuvo la oportunidad de tener el debido proceso, no se le permitió tener una entrevista de miedo creíble» que presentan los migrantes en la frontera al pedir asilo y «tampoco pudo ver a un abogado».
La menor de 6 años tuvo gripe y la bebé tuvo fiebre y una infección gástrica, por lo que ambas niñas fueron hospitalizadas cerca a McAllen.
«Fueron dadas de alta el lunes pasado luego de que una enfermera firmara la aprobación para viajar, pero las niñas están todavía enfermas», denunció la abogada.
«Ese mismo día les dieron la orden de deportación y en menos de 12 horas estaban en un avión para ser enviadas a Guatemala», comentó Cohen, quien agregó «cuando llegaron al aeropuerto se le preguntó si optaba por regresar a Honduras o pedir asilo en Guatemala».
«En un principio decidió regresar a su país, pero luego de que lográramos el contacto para que ella pudiera ver un abogado y las niñas fueran vistas por un doctor, decidió solicitar el asilo en Guatemala», dijo Cohen, quien indicó que «el esposo estaba aterrorizado con la idea de que regresaran a Honduras, temiendo por sus vidas».
Según Cohen, las niñas se enfermaron mientras estaban bajo custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), pues llegaron en «excelente estado» de salud a Estados Unidos, y su deterioro se «puede relacionar con la crueldad y las condiciones con las que fueron tratadas junto con su madre». EFE Desde que el pasado 21 de noviembre entró en vigor el envío de solicitantes de asilo en EE.UU., un centenar de migrantes de estas nacionalidades han sido deportados a Guatemala.