Por Edgar Castro/ANN ARBOR, MI (ELINF).-
Las clases en la Universidad de Michigan comenzaron el lunes 31 de agosto, y la administración de la Casa de Estudios Superiores está describiendo varias precauciones de seguridad que está tomando mientras continúa la pandemia de COVID-19.
El presidente Mark Schlissel y otros líderes universitarios enviaron una carta a los estudiantes la semana pasada para darles la bienvenida al campus y hacerles saber las precauciones de seguridad. El principal es el registro diario en la aplicación ResponsiBLUE. Cualquier persona que ingrese a los edificios del campus tendrá que comprobar si tiene síntomas de COVID-19 y responder una breve serie de preguntas en la aplicación. También se anima a los estudiantes y al personal a utilizar la herramienta a diario.
«Todos ustedes pueden esperar clases que reflejen la excelencia académica de la Universidad de Michigan», escribieron Schlissel y otros líderes en la carta. «Nuestras escuelas y universidades han diseñado cursos que se impartirán de manera que se enfrenten a los desafíos de la pandemia, ya sea que esté aprendiendo en persona con nosotros o tomando clases totalmente remotas” agrega la misiva.
La universidad también está limitando las reuniones al aire libre a 25 personas o menos, según las reglas del condado de Washtenaw. Para los estudiantes que dan positivo o deben ser aislados o puestos en cuarentena, la universidad dijo que ha reservado 600 habitaciones individuales para esos estudiantes si es necesario.
«Nuestros preparativos y precauciones se han desarrollado en colaboración con algunos de los principales expertos médicos y de salud pública de nuestra universidad. También hemos trabajado en estrecha colaboración con los estudiantes de la UM en muchas de estas medidas, y ha sido estimulante ver a sus compañeros de clase profundamente comprometidos con el planificación para un semestre exitoso «, escribieron.
La universidad también advirtió sobre el aumento de casos de COVID-19 que se observan a medida que los niños regresan a la escuela, y alentó a las personas a divertirse pero también a permanecer seguras y vigilantes. «Lo que puede parecer un breve momento de bajar la guardia podría terminar cerrando nuestras clases en persona», escribieron.
