Tucson (EFE)
Después de una espera de dos décadas, Reyna Montoya no pierde la esperanza de que la última versión del “Dream Act” presentada por el senador Dick Durbin, cristalice en ley y los “soñadores” como ella puedan ser recompensados por tantos años de incertidumbre y temor a la deportación. “Ha sido una larga espera, ha sido difícil no perder las esperanza, pero al final del día reflexiono sobre nuestra situación y concluyo que no tenemos el lujo de darnos por vencidos”, dijo a Efe Montoya, fundadora de la agrupación Aliento en Arizona.
Ahora con la entrada del nuevo presidente Joe Biden y la reciente introducción de “La Ley del Sueño”, Montoya siente más cercana una solución que lleve a cientos de miles de jóvenes acogidos al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) en un camino a la ciudadanía. DACA fue anunciado el 15 de junio de 2012 por el entonces presidente Barack Obama (2009-2017) y el 5 de septiembre de 2017, la Administración de Donald Trump anunció su terminación, medida que fue frenada por cortes federales en California, Nueva York y Washington.
Después de una larga lucha y los embates de Trump por terminar con DACA, revive un sueño que por años ha parecido lejano para los casi 660.000 soñadores en Estados Unidos, quienes esperan se defina su situación legal. “Ayer (jueves) introdujeron la propuesta de nuevo, que está en manos del Comité Judicial (del Senado). Cuando escuché a Durbin dar su discurso, ver cómo hasta se le cerró la garganta, sentí su lucha como nuestra. Él se comprometió a hacer de esto una ley. Sé que algunas cosas tardan, pero es importante no darse por vencido”, declaró Montoya.
Los senadores Durbin, demócrata por Illinois, y Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur, presentaron el jueves la última versión del Dream Act (Ley del Sueño), que forma parte de un nuevo impulso de reforma migratoria. La legislación propuesta, presentada por primera vez en 2001, daría a los inmigrantes indocumentados traídos a Estados Unidos cuando eran niños la oportunidad de seguir un camino hacia la ciudadanía estadounidense. La reintroducción de la iniciativa se produce cuando el presidente Joe Biden comienza a implementar su agenda de reforma migratoria y apunta a revertir muchas de las políticas de inmigración del hoy expresidente Donald Trump.
“Esta propuesta la han introducido muchas veces, hasta con Obama. Vaya que ha sido un camino largo, pero esperemos que con Biden se haga realidad. Está apoyando las propuestas migratorias de frente, y espero que aprenda de los errores de la Administración de Obama”, dijo la soñadora.
Nacida en Tijuana (Baja California, México), Montoya emigró a Arizona en 2003 y desde niña aprendió las dificultades que enfrentan los inmigrantes, lo que la llevó a fundar Aliento en 2016. La aprobación en 2010 de la ley SB1070 de Arizona, también conocida como «Ley del Odio», que otorga el poder a los departamentos policiales de cuestionar el estatus migratorio de los detenidos, fue clave para que la soñadora se involucrara más en la lucha por los derechos de los inmigrantes, al ver cómo su padre fue deportado. Reconocida como una de las soñadoras con más influencia en Estados Unidas por la Revista Forbes, Montoya asegura que seguirá «peleando por lograr una legalización para miles de migrantes en el país”.
“En esta lucha el senador Durbin, a quien tuve el placer de conocer, no se ha dado por venido y sabe que no podrá hacerlo solo. Necesitamos trabajar mano a mano para lograr una ley, así que tenemos que movilizarnos y asegurarnos de que seamos una prioridad para los políticos”, afirmó Montoya, quien actualmente reside en Mesa (Arizona).