Editorial por Luis Molina
La familia, cualquiera que sea la manera como esté constituida, influye directamente en la formación y protección de sus miembros, así como en la toma de decisiones. Su papel y apoyo son claves en todas las etapas del desarrollo de la persona, desde la infancia hasta la adultez mayor.
Desde la niñez, la familia debe brindar las oportunidades necesarias para que ellos desarrollen sus destrezas, preferencias, valores, potencialidades; y esto se logra no solo con las posibilidades que la educación y el centro educativo ofrecen, sino que cobra especial importancia que la familia favorezca un desarrollo integral mediante la participación en actividades artísticas, culturales, deportivas, entre otras.
No obstante, debe hacerlo conscientemente de la influencia que puede ejercer, porque en ocasiones los padres o madres inscriben a los niños en alguna clase determinada, según su criterio, los padres son los primeros oponentes.
Con miras al futuro, ese apoyo de la familia es trascendental, pues da a los hijos las oportunidades de desarrollo, abre un abanico de posibilidades y les prepara mejor para el planteamiento del proyecto de vida.
Por el contrario, es común que jóvenes que provienen de familias donde no se han propiciado estas oportunidades, tengan menos claridad de sus preferencias y aptitudes para el futuro.
Otra etapa donde la familia y principalmente padres, madres y encargados tienen una labor fundamental es en el proceso de elección vocacional de hijos e hijas. A ellos se les debe acompañar, facilitar información, ayudarlos para que tomen una decisión informada y consciente, pero la decisión de qué carrera estudiar, debe ser resultado de un proceso de análisis personal de la persona adolescente.
Muchas veces los padres influyen en esa decisión y obligan a los hijos a estudiar carreras que ellos no quieren o no les gusta, esto ejerce una gran presión sobre los hijos y en muchos casos esto no termina bien.
El apoyo de la familia es indispensable también durante la etapa de la adultez mayor, como ente que valora, apoya, acompaña, busca soluciones y oportunidades, para aprovechar el talento, la experiencia y la ilusión de quienes viven esta etapa mediante cursos y actividades que diferentes instituciones llevan a cabo para esta población.
Como es claro, la familia tiene un papel trascendental en la vida de cada persona y es coautora y forjadora del proyecto de vida de cada uno de sus integrantes.