La nevada continúa en los Grandes Lagos después de que cayeran más de 1,5 metros de nieve durante el fin de semana festivo, lo que colapsó los desplazamientos, dejó a los automovilistas varados y cubrió las viviendas de nieve. Se espera una breve pausa antes de que caigan varios centímetros más de nieve y llegue una ráfaga de aire helado.
Pero primero, es probable que caiga 30 centímetros más de nieve hasta el martes en algunas de las mismas zonas de los Grandes Lagos que ya se vieron afectadas durante el fin de semana a medida que continúe el actual fenómeno de nieve de efecto lago.
La nieve de efecto lago se produce cuando el aire frío pasa por encima de los lagos relativamente más cálidos y se manifiesta en forma de una serie de períodos de nieve estrechos pero intensos, conocidos como bandas de nieve, que se desprenden del lago y se extienden en un área cercana a él en dirección del viento. Los totales de nieve pueden acumularse cuando estas bandas de nieve llegan, o permanecen más estacionarias, sobre un área en particular.
Partes del extremo noroeste de Pensilvania y el suroeste de Nueva York podrían acumular cerca de 50 centímetros adicionales de nieve. Las rachas más intensas de nieve de efecto lago llegarán a su fin el martes, pero algunas zonas tendrán apenas 24 horas o menos para recuperarse antes de que una tormenta azote la región.
Esta tormenta de rápido movimiento dejará caer varios centímetros de nieve en gran parte de los Grandes Lagos y partes del sur de Canadá a partir del miércoles temprano antes de su paso a través del noreste el jueves.
Los totales de nieve de esta tormenta no serán tan significativos como los de la nieve de efecto lago durante el fin de semana festivo. Es probable que se acumulen unos pocos centímetros desde los Grandes Lagos a través de las zonas elevadas del noreste con una mezcla irregular de lluvia y nieve para algunas elevaciones más bajas.
La nieve de efecto lago volverá a aparecer el jueves como consecuencia de la tormenta, ya que otra ráfaga de aire gélido similar al de enero envolverá el este de EE.UU. a finales de esta semana.
Es demasiado pronto para saber exactamente la cantidad de nieve que la próxima ronda de efecto lago tiene reservada para la región de los Grandes Lagos, pero las primeras previsiones no son tan extremas como las del pasado fin de semana.
Casi el 70% de los estados contiguos bajos de Estados Unidos, que representa a unos 220 millones de personas, debería ver cómo las temperaturas alcanzan o descienden por debajo del punto de congelación hasta el próximo fin de semana.
El jueves por la mañana, las temperaturas mínimas volverán a ser de un solo dígito o por debajo de cero en gran parte del centro-norte de EE.UU. y partes del Medio Oeste. Las temperaturas estarán por debajo de cero el viernes en casi toda la parte baja del país, con la excepción de la costa oeste y partes del sur.
El aire frío que se precipita sobre los lagos relativamente cálidos es el mismo principio que permitió la caída de nieve de efecto lago durante el fin de semana festivo. Algo más de 1,65 m de nieve cayó en parte de la región de Tug Hill de Nueva York, una zona conocida por los totales masivos en los eventos de efecto lago.
La nieve de efecto lago sepulta una casa en Conneaut, Ohio, el sábado. Crédito: Ashley Drew
“Durante la nevada de efecto lago, el tiempo puede variar de bandas de nieve localmente pesada con visibilidad muy reducidas a condiciones secas a pocos kilómetros de distancia”, dijo el Servicio Meteorológico Nacional en Buffalo, Nueva York. “Esté preparado para cambios rápidos en el tiempo, la visibilidad y las condiciones de la carretera”.
Este fin de semana se demostró lo debilitante que es la nieve de efecto lago para los viajes.
Cientos de viajeros varados
Las condiciones de viaje más traicioneras se produjeron después de Acción de Gracias, durante algunos de los días de mayor afluencia de viajeros del año.
La policía del estado de Nueva York ayudó al menos a 110 vehículos inutilizados desde partes del oeste de Nueva York hasta la frontera con el estado de Pensilvania entre el Día de Acción de Gracias y el domingo, según informaron las autoridades en un comunicado de prensa.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, declaró el estado de emergencia en 11 condados a medida que las condiciones se deterioraban rápidamente el viernes.
“Mi administración está trabajando sin descanso para responder a la tormenta de nieve en el oeste de Nueva York y el norte del país”, dijo Hochul en X el sábado. “Nuestras agencias estatales y más de 100 miembros de la Guardia Nacional están sobre el terreno para apoyar las operaciones de la tormenta”.
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, también llamó a la Guardia Nacional de su estado el sábado para ayudar a los automovilistas varados y garantizar que los equipos de emergencia puedan llegar a cualquier persona atrapada, dijo en X.
La Policía Estatal de Pensilvania respondió a casi 200 incidentes en carretera durante un periodo de 24 horas el viernes y el sábado, según la oficina de Shapiro.
En Erie, Pensilvania, las condiciones traicioneras del domingo provocaron que algunos de los conductores de quitanieves de la ciudad se quedaran atascados mientras retiraban la nieve, dijeron las autoridades municipales en Facebook.
North East, Pennsylvania, un municipio del condado de Erie, registró algo más de 106 centímetros de nieve entre la noche del jueves y la tarde del sábado, mientras que Erie recibió 78 centímetros. En la localidad neoyorquina de Barnes Corners se registraron 102 cm de nieve el domingo por la mañana.
