Sharon Carr, una mujer residente de Tulsa (Oklahoma, EE.UU.), fue arrestada por un cargo de robo en primer grado luego de que los residuos de los ‘snacks’ Cheetos hallados entre sus dientes le vincularan a un intento de robo de un hogar, aseguró el Departamento de Policía Tulsa en un comunicado.
La Policía recibió la llamada de una mujer que se encontraba en su domicilio con sus dos hijos pequeños, alertando que alguien intentaba abrirse paso a través de una ventana. Cuando los oficiales llegaron al hogar descubrieron una bolsa vacía de Cheetos y una botella de agua en el piso, cerca de la ventana, que Carr presumiblemente dejó en el lugar antes de escapar, sin alcanzar a robar nada.
Minutos después, las autoridades encontraron a la presunta delincuente, quien fue identificada por la mujer que denunció el hecho. Los residuos de los bocaditos sabor a queso de color naranja atascados entre sus dientes fueron parte de las pruebas incriminatorias.
El Departamento de Policía mencionó que este caso es «un buen recordatorio de que el polvo de Cheetos puede ser bastante difícil de eliminar».