Editorial por Hector Loya:
El uso y abuso de drogas es una conducta que está siendo cada vez más frecuente y alarmante en la población adolescente, sobre todo por la asociación que se le hace referente a otras conductas de riesgo, tales como las tendencias suicidas, violencia, actividad sexual no planificada, deserción escolar, conducción de vehículos en forma imprudente, entre otras.
Es así como, el uso de las distintas drogas, tanto legales como ilegales, se da en relación a un sinfín de variables relacionadas al que la consume y al proceso en el cuál este viviendo, tales como la familia, las relaciones de pareja, el colegio y los contextos de ocio o tiempo libre.
Todas estas variables deben ser abordadas y manejadas a la brevedad, entendiendo que muchas de éstas podrían convertirse en la causa de un problema mayor.
El abuso de las drogas puede ser una experiencia dolorosa, tanto para la persona que las consume como para sus familiares y amigos, quienes pueden sentirse impotentes frente a la situación. Pero si tiene conocimiento o sospecha que alguien cercano tiene un problema con las drogas, hay cosas que puede hacer para ayudarlo.
La primera forma de atender esta situación es desde la familia, puesto que esta es la primera escuela de la vida, y es en la misma que los padres intentan transmitir a sus hijos, a través de un ambiente de amor, los valores que creen forman a una persona buena, íntegra, coherente y capaz de estar en sociedad.
Es fundamental antes que nada tener una visión preventiva a estos usos y abusos, entendiendo que la mayoría de los adolescentes en la actualidad tienen fácil acceso a las drogas y que todo consumo constituye un gran riesgo.
Además de la familia es necesario actuar buscando el apoyo de los expertos, ya sea en grupos de ayuda profesional, o centros de rehabilitación en caso de que ya se padezca esta grave enfermedad.
No hay que perder de vista a los jóvenes porque como dice la palabra “adolescente” es porque son propensos de adolecer los males y las consecuencias que una falta de madurez les puede traer al tomar una mala decisión. Vea por la vida de su hijo y por su futuro.