Los Ángeles, 10 dic (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
La mala gestión del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para contener la pandemia de coronavirus en los centros de detención hizo que la enfermedad se extendiera rápidamente dentro de las instalaciones y las comunidades vecinas, afectando a cerca de 250.000 personas, encontró un estudio publicado este miércoles.
Un informe «Hotbeds of Infection” de la organización Detention Watch Network aseguró que «el impacto de la incapacidad del ICE para responder adecuadamente a la pandemia fue de gran alcance y de múltiples niveles”.
Para el 1 de agosto, casi 5,5% del total de casos en Estados Unidos se atribuían a la propagación desde los centros de detención del ICE, según el informe.
El análisis destaca que entre mayo y agosto de 2020, los centros de detención del ICE fueron responsables no solo de miles de casos de covid-19 en sus centros de detención, sino que contribuyeron a más de 245.000 casos adicionales en comunidades de todo el país.
Los condados con centros de detención del ICE tenían más probabilidades de reportar casos de covid-19 y de enfrentar un brote importante (más de 250 casos) y una emergencia de atención médica (más de 2.500 casos confirmados).
El informe, escrito por Gregory Hooks, profesor de sociología en la Universidad McMaster, y Bob Libal, analista de políticas y promotor de la reforma de inmigración en Texas, analizó el crecimiento de los casos de covid-19 en condados y áreas económicas con centros de detención del ICE, manteniendo constante una serie de otros factores que pueden contribuir a la propagación de la enfermedad.
«Las consecuencias de la insensible indiferencia del ICE hacia la salud de las personas detenidas y su propio personal se vieron magnificadas muchas veces por la propagación incontrolada de la covid-19 en comunidades de todo el país”, resaltó Hooks en un comunicado de prensa.
Desde que comenzó la pandemia en marzo pasado, el ICE ha registrado hasta este miércoles de 7.801 casos positivos y al menos ocho muertes relacionadas con la enfermedad. Actualmente, según datos del ICE, 492 inmigrantes detenidos padecen la enfermedad.
El análisis resalta que “a pesar de que los casos de covid-19 han aumentado en todo el país, el ICE ha intensificado las actividades de aplicación (de la ley), creando una receta para el desastre para los detenidos y las comunidades circundantes”.
Al respecto, Libal explicó que «las personas que trabajan en los centros de detención viajan hacia y desde sus hogares y comunidades todos los días, potencialmente portadores del virus» Sumado a esto, «el ICE se ha negado a detener su traslado irresponsable de personas a través del sistema de detención durante la pandemia», destacó el investigador.
“El hecho de que el ICE no manejara la pandemia de covid-19 propagó la enfermedad mortal dentro de su sistema de detención y mucho más allá de los muros de detención”, valoró.
El informe recomendó que el ICE preste atención de inmediato a los consejos de los expertos en salud pública, reduciendo de manera significativa y rápida el número de personas detenidas. También que se abstenga de realizar nuevos arrestos de inmigrantes.
Además sugiere que se detengan todas las transferencias dentro del sistema de detención de inmigrantes, así como las transferencias desde cárceles y prisiones estatales y locales; y la adopción de una moratoria sobre las deportaciones.