El actor mexicano Octavio Ocaña, conocido por interpretar a Benito en la serie Vecinos, falleció al autoinfligirse accidentalmente un disparo en la cabeza cuando se activó el arma que portaba en una de sus manos, concluyeron las autoridades.
El intérprete, de 22 años, murió la tarde del viernes en una autopista del Estado de México cuando huía de la policía en su camioneta. Sus dos acompañantes fueron detenidos e interrogados.
Los análisis toxicológicos también constataron que el joven había consumido alcohol y marihuana.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Fiscalía General de Justicia estatal (FGJEM) determinaron que Ocaña llevaba un arma calibre .380 y tenía dos cartuchos útiles.
En el interior del vehículo fue hallado un casquillo percutido que salió de esa misma arma, de acuerdo con las pruebas balísticas.
«Estos indicios balísticos encontrados y analizados han permitido establecer que la bala por la cual perdió la vida Octavio ‘N’ fue disparada por el arma de fuego calibre .380, a corta distancia», explicó la FGJEM en un comunicado.
Las autoridades señalaron además que la bala produjo «una lesión con características de orificio de entrada ubicado en parietal derecho y orificio de salida en parietal izquierdo, en ángulo ascendente».
En consecuencia, su trayectoria corrobora que el arma «fue disparada desde el interior del vehículo y por la persona que la portaba».
Los acompañantes de Ocaña, que confirmaron que habían tomado alcohol, declararon que circulaban por las calles de la localidad de Cuautitlán Izcalli cuando agentes les pidieron que se detuvieran. El actor, sin embargo, decidió acelerar para no ser detenido
Se inició entonces una persecución que les llevó hasta la autopista Chamapa-Lechería. En un momento dado, Ocaña «sacó de la guantera de la camioneta un arma de fuego, la cual empuñó en la mano derecha, mientras conducía con la izquierda y mantenía su huida», según dijeron sus acompañantes a las autoridades.
Durante la huida, el actor perdió el control de su camioneta y chocó contra otros vehículos que se encontraban en la carretera. «En este momento y a consecuencia de la dinámica de este percance, el conductor presumiblemente accionó el arma de fuego que portaba en su mano derecha».
Uno de los policías involucrados en la persecución declaró que «encontraron en el asiento del conductor a una persona con una lesión en la parte derecha de la cabeza, misma que se encontraba aún con vida y empuñaba un arma de fuego en la mano derecha».
Las pruebas toxicológicas hallaron etanol y tetrahidrocannabinol por encima de los límites permitidos, por lo que Ocaña había consumido alcohol y marihuana antes del accidente.
