a policía de Colorado ha arrestado a tres personas en relación con la muerte de una niña de 5 años que bebió agua de un bong que contenía metanfetamina.
Se trata de Sophia Larson, de 5 años, quien murió el 11 de diciembre por un ataque al corazón mientras se quedaba con su madre, Stephanie Alvarado.
Según las declaraciones de la corte la niña bebió «agua de metanfetamina» de una botella de agua de plástico que se había quedado en una mesa.
Según los documentos judiciales la madre y sus dos primos supuestamente se dieron cuenta de que era una botella que habían usado como pipa de agua cuando fumaban metanfetamina.
Los testigos le dijeron a la policía que Sophia comenzó a alucinar después de ingerir el agua, pero supuestamente su madre no la llevó al hospital de inmediato.
La declaración jurada alega que Alvarado trató a su hija caseramente dándole leche, envolviéndola en una manta, rezando y leyendo la Biblia. Más tarde la llevó a un apartamento cercano para darle oxígeno a través de un tubo.
Cuando Sophia dejó de respirar, la madre y sus primos la llevaron al Hospital Grand River en Rifle, Colorado, pero era tarde, la niña murió a la mañana siguiente.
El forense del condado de Garfield dijo que la causa de la muerte fue la intoxicación por metanfetaminas. Un informe de toxicología encontró que Sophia tenía una cantidad «muy, muy alta» de metanfetamina en la sangre.
Las autoridades arrestaron a Alvarado, de 26 años, así como a dos de sus primos: Bertha Karina Ceballos-Romo, de 28 años, y Daniel Alvarado, de 27 años, los tres enfrentan cargos de abuso infantil que resultó en la muerte de la niña, posesión de una sustancia controlada y peligro imprudente.
