Medios locales rusos informaron que en la provincia de Leningrado, una perra embarazada resultó gravemente herida en un incendio que tuvo lugar en un hogar de ancianos.
Todos los residentes del hogar de ancianos fueron rescatados por el servicio de bomberos. Mientras el edificio estaba en llamas, la perra, llamada Matilda, intentó encontrar a su dueña y ladró fuertemente hasta que se desmayó a causa del monóxido de carbono.
La perra sufrió terribles quemaduras en la cara, las orejas, el vientre y las patas, y se espera que dé a luz a varios cachorros a finales de mes. Pese a todo un veterinario indicó que todos los cachorros se están desarrollando en correcto estado.
Tras el incidente, la dueña de Matilda abandonó a la mascota porque no podía cuidarla y la jefa de un refugio local adoptó a la perra. Desde el refugio indicaron que «ahora están haciendo increíbles esfuerzos para curarle el abdomen», al tiempo que «el hocico se está curando muy bien», y esperan que se recupere muy pronto.