GRAND RAPIDS, ,MI (ELINF).- El departamento de policía de Grand Rapids arrestó a Jilmar Ramos-Gómez el 21 de noviembre después de que el hombre provocara un incendio y obtuviera acceso al helipuerto en el hospital Spectrum Butterworth. Luego de su arresto, el Sr. Ramos-Gómez fue detenido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de los Estados Unidos por posible deportación. ICE había determinado que el Sr. Ramos-Gómez estaba ilegalmente en los Estados Unidos. Después de una investigación se demostró no ser cierto, ya que el hispano nació en los Estados Unidos.
“Una vez más quiero agradecer a la American Civil Liberties Union (ACLU) de Michigan y al Centro de Derechos de los Inmigrantes de Michigan por compartir sus preocupaciones sobre el manejo de nuestro departamento de policía del caso que involucra al Sr. Ramos-Gómez”, indicó David Kiddle, jefe policía interno. “Dirigí a la Unidad de Asuntos Internos (IA) de nuestro departamento para abrir una investigación sobre este asunto inmediatamente después de su solicitud de revisión. Esta investigación fue una alta prioridad para nuestro departamento de policía y los líderes de la Grand Rapids”, agregó.
La investigación ha determinado que el oficial de policía que se acercó a ICE luego del arresto del Sr. Ramos-Gomez lo hizo basándose únicamente en la naturaleza de sus acciones. El oficial, asignado como enlace del departamento con ICE, había llegado a la conclusión de que las acciones del Sr. Ramos-Gómez cumplían los criterios de un posible acto de terrorismo.
“La primera prioridad de nuestro departamento de policía es mantener a nuestra comunidad segura. No hacemos cumplir las leyes de inmigración. Ponerse en contacto con ICE no es una parte rutinaria de nuestro proceso de investigación. Más bien, lo hicimos a la luz del riesgo potencial para la seguridad del público, específicamente a través de un posible acto de terrorismo”, comentó Kiddle.
GRPD ha garantizado que las políticas, prácticas y protocolos cumplan o superen las prácticas en materia de vigilancia. Y este caso servirá como una oportunidad para revisar los contactos con ICE. Evaluar las políticas, protocolos y mantener la seguridad de todos en Grand Rapids.
“Le pedí a la ACLU y al Centro de Derechos de los Inmigrantes de Michigan que compartan el idioma o los recursos Ellos quieren que consideremos durante esta revisión. Estamos comprometidos a ser una comunidad acogedora donde todos se sientan seguros. Quiero asegurarle a la comunidad que la seguridad, y no el estatus migratorio, es nuestra principal prioridad”, finalizó el actual jefe de policía interino.