Washington, 5 sep (ELINFORMADORUSA/EFEUSA).- El congresista republicano Mike Coffman presentó hoy un proyecto de ley que extendería el programa conocido como Estatus de Protección Temporal (TPS) para todos los países que son beneficiarios de él hasta el 15 de septiembre de 2021.
En los últimos meses, el Gobierno del presidente, Donald Trump, ha arrebatado la protección del TPS a 55.000 hondureños, 195.000 salvadoreños y 50.000 haitianos, entre otros, a los que ha dado entre 12 y 18 meses para que regresen a sus países o que cambien su estatus migratorio.
Una vez superadas las fechas límites, la Administración Trump podría deportar legalmente a todas esas personas sin amparo migratorio.
«Esta legislación tiene como objetivo proporcionar certeza y estabilidad a quienes viven bajo TPS, mientras que el Congreso y la Administración debaten un camino hacia adelante. Tener fechas de vencimiento separadas para diferentes países causa dificultades innecesarias a una población que ya enfrenta incertidumbre sobre su futuro», dijo Coffman, representante por Colorado.
Actualmente, los diez países que participan en el TPS tienen fechas de vencimiento que se extienden hasta 2020, siendo Sudán el más apremiante ya que expira en noviembre de 2018.
El Congreso creó el TPS en 1990 como parte de la Ley de Inmigración de 1990, que otorga un estatus legal temporal a los ciudadanos extranjeros que no pueden regresar a sus países de origen debido a un conflicto armado, una guerra civil, huracanes, terremotos u otros desastres naturales.
Conforme a la ley, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) tiene discreción exclusiva de determinar cuándo los ciudadanos de otros países son elegibles para TPS.
Una vez que se determina, estos individuos pueden recibir permiso para vivir y trabajar en el país por un período de entre seis y 18 meses, que pueden ser renovados de forma indefinida hasta que se establezcan los factores que impidieron que estas personas regresen a su país natal ya no están vigentes.
«En Colorado, aproximadamente 1.400 residentes son titulares actuales de TPS. Estos son empleados, propietarios de pequeñas empresas y propietarios que han establecido sus raíces en este país legalmente y necesitan certeza, en algunos casos, muchos han estado aquí hasta 20 años», agregó el congresista.
El republicano añadió que los beneficiarios en su estado son padres de más de 1.600 niños nacidos en Estados Unidos y algunos incluso tienen nietos en este país, por lo que el fin del TPS podría romper miles de familias.
Según un informe del Servicio de Investigación del Congreso citado por Coffman, actualmente hay más de 436.000 inscritos en el TPS en todo el país, de los cuales aproximadamente el 90% son de El Salvador (262.000), Honduras (86.000), Haití (58.000) y Nicaragua (5.000).