Editorial por Luis Molina
Esta semana se cometió en Grand Rapids un acto atroz en el cual un hombre que cuidaba a un bebé de un año decidió azotarlo contra el piso solo porque no dejaba de llorar.
En mi punto de vista se necesita ser muy insensible porque en qué cabeza cabe agarrar a un pequeño inocente e indefenso y azotarlo no solo una vez sino tres veces contra el piso.
Y después de eso tranquilamente salir a fumar un cigarro, esto es de personas desalmadas, de personas sin corazón y con muy poco razonamiento por no decir más feo.
Quien en su sano juicio se atreve a lastimar a un pequeño de tan solo un año y le arrebata la vida de esta manera. Es un acto monstruoso de una persona que tal parece no tener sentimientos.
Sin duda alguna un acto de esta naturaleza merece todo el peso de la ley y un severo castigo.
También quisiera decir algo a las madres de estos niños, que no confíen de inmediato, en sus novios, amigos o parejas sentimentales, ya que toma tiempo conocer a una persona de verdad para poder dejar a sus hijos a su cuidado. Solo así se podrán evitar un poco estas tragedias.
Cuántos niños no han sido asesinados, maltratados y hasta violados por monstruos de este tipo y las madres siguen sin abrir los hijos, antes de ser parejas son madre y deben cuidar a sus pequeños.
Las mujeres no deben perder la razón ni el juicio por un hombre que podría o no lastimar a sus hijos.
Pero bueno volviendo al punto de muertes tan lamentables como la de este pequeño nos dan a entender que se debe tener cuidado, que se pueden evitar y que si necesitan a alguien que se los cuide mejor busquen a un familiar directo responsable y de confianza o lo lleven a una institución de cuidado certificada.
Las cosas están muy feas en el mundo y que una vida se haya perdido a tan temprana edad es una verdadera pena, esperamos que se haga justicia y que el responsable reciba el castigo que se merece.