Por Edgar Castro/NEWAYGO, MI
Funcionarios informaron que recientemente se detectó que el lago Hess tiene un problema de algas por lo que la solución que se planteó fue el reducir la cantidad de peces carpas. El pasado martes, los investigadores sacaron cientos de peces que se alimentan del fondo del lago poco profundo del condado de Newaygo, registraron su longitud y peso antes de arrojarlos a un contenedor de basura.
A primera vista puede verse como una medida cruel, sin embargo, una población excesivamente grande de carpas representa un grave problema para el medio ambiente. Cuando buscan alimento, las carpas reducen la cobertura vegetal y levantan nubes de sedimentos y nutrientes, incluido el fósforo, el elemento vital que puede provocar la proliferación de algas tóxicas de color verde azulado.
La empresa contratada para manejar la población de las carpas indicó que buscan reducir la población a 5 mil peces considerando en estimaciones anteriores llegaron a registrarse 32,000 carpas.
A medida que se logra reducir la presencia excesiva de la especia se logra restablecer el regreso de las poblaciones de peces nativos, la vegetación se regenera y la calidad del agua mejora sustancialmente. Se planean tareas en los próximos días para seguir con la operación de captura de carpas en el lago.