Por: Roger Rivero
Uno de los autos que más ha contribuido al éxito de Hyundai en Estados Unidos es el Santa Fe. Introducido en el 2001, sus ventas en algunos momentos sobrepasaron la capacidad de producción, encontrando mayor resistencia en años recientes con la desmesurada proliferación de acompañantes en el sector.
Hyundai siempre ha sido prudente introduciendo cambios al Santa Fe y la tercera generación que fue introducida en el 2013, no ha sido la excepción. Su estilo elegante ha sido sin duda atractivo para aquellos que buscan una alternativa, entre los crossovers de tres filas de asientos. Comprometido en cierta medida en su capacidad de carga y el espacio de la tercera fila -como la mayoría de los vehículos en este sector- se distingue por un motor refinado en V-6 que proporciona músculo para el remolque, aunque la economía de combustible le deja rezagado con la mayoría de sus rivales. Enriquecido con prestaciones que comienzan en el nivel básico de equipamiento SE, una garantía insuperable, buena apariencia y comodidad interior, son puntos fuertes que, para algunos, pueden compensar sus deficiencias.
Este es el último año para la presente generación del Santa Fe, que estrenará modelo en el 2019. El pasado año recibió una buena dosis de actualizaciones. Un refrescamiento cosmético del exterior incluyó un diseño rediseñado del frente y la parte posterior, nuevas luces traseras, tubos de escape dobles y nuevos diseños de ruedas. El Santa Fe también ganó un selector de modo de manejo con ajustes para Normal, Eco y Sport. Una pantalla táctil de 7 pulgadas se convirtió en estándar para el sistema de infoentretenimiento, así como la conexión con Android Auto, Apple CarPlay. Hyundai también agregó un conjunto de características de seguridad activa a la lista de opciones para el 2017, incluido el frenado automático de emergencia y el control de crucero adaptativo.
Tanto el Santa Fe Sport de dos filas de asientos como el hermano mayor de tres se venden en tres acabados. El base Sport está propulsado por un motor de 2.4 litros y cuatro cilindros (185 caballos de fuerza, 178 lb / ft de torque), mientras que los 2.0T y 2.0T Ultimate están impulsados por un motor turbo de 2.0 litros (240 CV, 260 lb-ft ) Una transmisión automática de seis velocidades es estándar en todos los ámbitos, y cualquier modelo se puede encontrar con tracción delantera o total.
El Santa Fe de tres filas se ofrece con un motor más potente de 6 cilindros y 290 caballos de fuerza. Ninguno de los motores se puede considerar muy eficiente. El Santa Fe Sport llega a las 21 millas por galón en la ciudad y 27 en la carretera, mientras que el motor de V6 se queda en 18 y 25 millas por galón.
Hyundai ofrece un nuevo paquete para el Santa Fe llamado “Value”, que incluye luces LED diurnas, luces antiniebla, espejos con calefacción, barras de techo, entrada y encendido sin llave, climatizador automático de doble zona, asiento del conductor eléctrico con ajuste lumbar, asientos delanteros con calefacción, pantalla de 7 pulgadas, servicios Hyundai Blue Link y radio satelital.
Hay otro paquete de equipamiento, el Premium, que agrega las características del Value, junto con una compuerta trasera levadiza eléctrica manos libres, una pantalla de información a color para el conductor, un espejo retrovisor con atenuación automática, tapicería de cuero, asiento delantero eléctrico para el pasajero, funcionalidad de deslizamiento y reclinación para los asientos traseros, y monitoreo de punto ciego con alerta trasera de tráfico cruzado.
El paquete Tech incluye el contenido del paquete Premium Equipment junto con un techo solar panorámico, un sistema de cámaras en 360 °, sensores de estacionamiento traseros, ajustes de la memoria del asiento del conductor, volante con calefacción, asientos delanteros ventilados, asientos traseros con calefacción, unas 8 pulgadas de pantalla táctil, navegación y un sistema de audio premium Infinity de 12 parlantes.
Hay un paquete más disponible, si es que desea ir por todas las opciones: el paquete 2.0T Ultimate’s Tech. Incorpora faros adaptables con control automático de luz de carretera, control de crucero adaptable, frenado automático de emergencia, advertencia de cambio de carril y un freno de estacionamiento electrónico con retención automática, así como llantas de aleación de 19 pulgadas, faros de xenón y luces traseras LED. Con todas las opciones incluyendo AWD -traccion total- un Santa Fe Ultimate estaría fácilmente sobre los $40,000 dólares.
Claro hay opciones más económicas. El Santa Fe Sport comienza en los $24,950. El más barato de los de 3 filas de asientos es el SE con precio inicial de $30,850. El SE Ultimate comienza en los $38,850 mientras que el Limited Ultimate como el que nosotros probamos en los $39,550. Agregarle tracción total a cualquier modelo adicionaría unos $1,750 a la cuenta.
El 2018 Hyundai Santa Fe recibió la calificación más alta de seguridad total de cinco estrellas de la NHTSA. Se le considera Top Safety Pick + 2018 porque el crossover recibió la calificación más alta de en cinco pruebas de colisión y la segunda calificación más alta de aceptable para la nueva prueba de choque frontal de superposición pequeña en el lado del pasajero.
En carretera no es tan animado y algunas imperfecciones en el trayecto se pueden sentir con severidad. Los que estén en busca de algo más de dinamismo al conducir pueden mirar al Dodge Durango o el Mazda CX-9″. El 2018 Santa FE es espacioso, está bien equipado y ofrece una clasificación de seguridad líder en su clase. Los que prefieran más potencia o mejor economía de combustible encontraran variadas ofertas, sin descontar que por la correlación valor precio este Hyundai recibe marcas altas. Solo queda esperar para ver que nos tienen preparado para el totalmente nuevo 2019 Santa Fe…“mantengan la sintonía”
