Prospero Hernández de 43 años, quien es acusado de abusar de Tania Montes cuando ella tenía 11 años de edad, el hispano se encuentra en la cárcel bajo una fianza de $300,000 dólares y enfrenta dos cargos por delitos sexuales de primer y segundo grado. (Foto cortesía: KCM)
Hispana confiesa abuso sexual cuando era niña
Por Erika Mendivil / El Informador
WYOMING, MI (ELINF).- Tania Montes, una joven hispana quien desde muy temprana edad ha conocido el sufrimiento. Por un lado, su padre un hombre golpeador quien gastaba el dinero en drogas y bebidas alcohólicas, y una madre que por causas fuera de su voluntad tenía que trabajar duramente para sacar a la familia adelante. Por esa razón, la familia optó por poner una habitación del hogar en renta y lograr salir abantes con los gastos del mes.
Al poco tiempo de que la familia publicara un anuncio en las tiendas de la localidad, una familia hispana llamó a la puerta de los Montes, se trataba de una pareja con un bebé de 8 meses.
Después de un mes, Prospero Hernández quien fuera el jefe de familia y nuevo inquilino, empezó a interactuar con Tania que tenía en ese entonces tan solo 11 años de edad. Al inicio, las conversaciones eran triviales pero el hombre; comentó la víctima le tocaba el cabello y le decía cosas como: “eres muy bonita”.
“Me decía: estás muy bonita y a mí se me hacía raro… porque apenas llevaba un mes en la casa”, señaló la joven hispana frente a las cámaras de El Informador.
Tania explicó que un día estaba en su cuarto y mientras su padre y su hermano salieron a la tienda. Prospero Hernández entró a su habitación y empezó a besarla por la fuerza. La joven al no comprender lo que pasaba se quedó paralizada y comenzó a llorar. El hombre salió del lugar y al poco tiempo el padre de la víctima regresó al hogar y al ver a Tania le preguntó porque lloraba, pero la niña decidió no decirle nada para no ser golpeada por su progenitor.
Debido al problema de violencia doméstica que sufría Tania y su familia por parte del padre, la joven optó por no decirle nada a su familia y así evitar problemas en el hogar.
Sin embargo, la hispana quien ahora tiene 22 años y es madre de un bebé, rompió el silencio y reveló su historia.
“Cuando tenía 11 años mi cuarto no tenía para poner llave y en ocasiones necesitaba ir al baño o si ocupaba ir a la cocina por algo de beber o comer siempre tenía miedo de salir de mi habitación. Me asomaba para ver que él no estuviera cerca”, explicó Montes. “Si mi hermano estaba dormido, se metía a bañar o si mi papá no estaba en la casa; no sé si la esposa de Prospero estaba dormida pero el aprovechaba esos momentos para tocarme”, añadió.
En la entrevista, Tania comentó que el hombre le tocaba los pechos y sus partes íntimas durante los abusos. En reiteradas ocasiones la besó a la fuerza y según explicó la hispana, Hernández la obligaba a tocarlo en sus genitales.
Montes indicó que el año pasado el mexicano se puso en contacto con ella mediante mensajes y los recuerdos volvieron a la mente de Tania. Como consecuencia, la joven entró en una etapa de tristeza y depresión. Por lo tanto, decidió primeramente confesarle los hechos a su madre, que le brindó todo su apoyo y juntas fueron a la estación de policía para hacer un reporte contra Prospero Hernández.
Según reveló la joven hispana, Hernández solo confesó una parte de los abusos; sin embargo, el presunto abusador fue puesto en custodia bajo una fianza de $300,000 dólares.
Tania declaró que si alguien es una víctima más de Prospero Hernández debe de romper el silencio y delatarlo a las autoridades correspondientes.
“Si alguien más fue víctima de este señor o sufrió lo mismo que yo, pueden hablar. No deben de callárselo”, dijo entre lágrimas la joven hispana. “Si alguien tiene miedo pueden encontrar ayuda, porque no es justo que alguien te haga daño y más cuando eres joven. Un niño no debería sufrir abuso”, agregó.
Entre sollozos, tanto Tania como María la madre de la hispana, se unieron en llanto frente a las cámaras de El Informador para explicar que el abuso sexual le causó muchísimo daño a Tania durante su niñez.
“Cuando estaba chiquita me peleaba mucho con mi hermano y compañeros de clase. Tenía un odio contra los niños, hasta me suspendieron de la escuela. Comencé a fumar, no podía mantener los trabajos, cada rato mi mamá y yo peleábamos y todo por el daño que me hizo él”, expresó la hispana. “No podía hablar con nadie, cuando algún hombre me decía: qué bonita eres; me sentía incomoda, como si no estuviera a salvo. Es algo horrible, como mujer no puedes sentirte bien, es como si alguien te fuera a hacer daño”, añadió.
María aconsejó a las familias en no confiar en nadie, sobre todo al querer ahorrar un poco de dinero, algunas las familias hispanas deciden compartir los hogares para a completar la renta.
“Traten de vivir unidos como familia, a veces por querer economizar metemos gente que no conocemos. Cuiden a sus hijos, muchas veces es la propia familia quien abusa de los niños”, explicó la madre de Tania. “Si sufren de violencia domestica quiero decirle que es muy difícil zafarse de esa vida, pero estamos en un país donde si nos ayudan. Si tu marido te dice que si lo meten a la cárcel va a salir y te va a matar uno debe de hablar con las autoridades y pedir auxilio. Porque vivir así daña mucho a los hijos y más si los dejas solos, ya sea porque uno tiene que ir a trabajar. El mejor consejo es que las mamás estén al pendiente de las criaturitas y que hablen para no sufrir de violencia doméstica”, agregó.
La familia de Tania Montes espera que se haga justicia, mientras tanto Próspero Hernández se encuentra en la cárcel enfrentando cargos por delitos sexuales de primer y segundo grado.