Editorial por Luis Molina
Se acerca el frío y con él un peligro al que están expuestas las personas que viven en la calle, el riesgo de morir por una hipotermia.
Si bien el gobierno de la ciudad, del estado y del país ha puesto mucho esfuerzo por mejorar las condiciones de vida de estos hombres y mujeres, dotando de albergues para que no pasen frío y hambre, la realidad es que a muchos de ellos les gusta vivir así y será muy difícil que los puedan hacer cambiar.
En lo particular me da tristeza verlos y en múltiples ocasiones les he tendido la mano dándoles dinero, comida y un abrigo, sin embargo la realidad detrás de esto es que ellos han decidido vivir así, ya sea por el alcoholismo, la drogadicción o algún otro vicio que los obligó a echar a perder su vida.
Dice un dicho: ‘Ayúdate que yo te ayudaré’ y aquí aplica a la perfección ya que habiendo albergues disponibles muchos de ellos prefieren vagar en las calles y pasar todo tipo de adversidades porque no pueden controlar y dejar el vicio.
Como les decía, en lo particular muchas veces he apoyado a estas personas económicamente pero con tristeza veo cómo el darles dinero solo les provoco más daño ya que en vez de emplearlo en algo bueno van y lo utilizan para seguir bebiendo, drogándose o intoxicándose con cualquier cosa, entonces lejos de hacerles un provecho les haces un mal.
También al darles comida a veces te la niegan o simplemente no se la comen porque lo que ellos quieren es dinero para seguir sustentando su vida de adicciones.
En fin… espero de verdad que no pongan en riesgo su vida con estos climas que cada vez bajan más y más pero sobre todo que no pierdan la vida a causa de una hipotermia por no querer o no poder buscar ayuda en un albergue.
