Editorial por Luis Molina/ El Informador
La ciudad de Grand Rapids, Michigan está considerada como una de las mejores ciudades para vivir y criar hijos, ya que ha sido catalogada como una ciudad tranquila por muchos años, más, sin embargo, cada día las cosas se están pintando diferentemente. La realidad es que no podemos tapar el sol con un dedo pues, tristemente, en estos últimos meses, y en particular esta semana, nuestra ciudad ha estado plagada de crímenes donde algunos de nuestros ciudadanos ya no están con nosotros.
En ciertas áreas de la ciudad debemos de ejercer mucho cuidado puesto que los vecindarios no son tan seguros como pensamos y, aunque es verdad que no podemos comparar esta ciudad con ciudades llenas de crímenes, como por citar un ejemplo, Chicago, pero sí es bueno que tengamos cuidado donde y a qué lugares frecuentamos.
Es de suma importancia, más que nunca, hablar y educar a nuestros hijos para que eviten, tanto estos barrios peligrosos, pero, más que nada enseñarles las consecuencias de asociarse con personas que están metidas en pandillas, crímenes, drogas y otras cosas que, al final del día, no dejan más que dolor y sufrimiento.
Las malas compañías solo echan a perder lo bueno que usted, como padre, ha formado y creado en su hogar. No permitamos que otros jóvenes, sin nada que hacer, vengan a estropear lo que, con tanto trabajo y sacrificio, usted ha formado.
Como padres, tenemos una gran responsabilidad de inculcarle y educar a nuestros hijos con buenos principios y valores para que en la adolescencia sean jóvenes de provecho. Tristemente, hoy día las cárceles están llenas de jóvenes que, por no pensar en las consecuencias, se han metido en tremendos problemas. Como padres, muchas veces ya es muy tarde para poderlos ayudar. Es ahora el momento, y en particular para los pequeños, pues ellos necesitan de nuestro tiempo, pero tiempo de calidad.
Es triste, pero estudios han revelado que los padres hoy día dedican, como promedio, 8 minutos diarios de calidad para con sus hijos, después tristemente nos andamos quejando de los actos de nuestros hijos. No debemos delegar nuestra responsabilidad a la niñera, pero aun la niñera de muchos niños es el monstruo de un ojo; “La Televisión”. ¿Y qué es lo que la televisión les enseña? Mayormente violencia, inmoralidad, drogas… y la lista es larga.
Cada semana publicamos noticias de gran dolor y tristeza donde jóvenes arruinan sus vidas y se meten en serios problemas con la ley. No veamos estas cosas como una historia más, tomemos acción y ayudemos a nuestros hijos a ser jóvenes hechos y derechos a medida que van creciendo.
Muchos padres cometemos el error de decir, “yo no quiero que mi hijo(a) se sienta presionad(a)”. Bueno, de una cosa usted puede estar seguro: si usted como padre no los presiona para que sean unos buenos hijos, téngalo por seguro que sus amigos y delincuentes de las calles los presionaran para que hagan cosas que después nos lamentaremos por no haberles inculcado buenos valores.
No permitamos que la próxima mala noticia sea de uno de nuestros hijos, tomemos cartas en el asunto desde ahora.
Violence is on the rise in Grand Rapids
Editorial by Luis Molina / El Informador
The city of Grand Rapids, Michigan, is considered to be one of the best cities where to live and raise children, as it has been listed as a quiet city for many years, however, everyday things are being painted differently. The reality is that we cannot cover the sun with a finger and sadly, in recent months, and in particular this week, our city has been plagued with crimes where some of our citizens are no longer with us.
In certain areas of the city we must exercise great care since the neighborhoods are not as safe as we think and, although it is true that we cannot compare this city with cities full of crimes, as an example, Chicago, but it is good for us to be careful of where and to what places we frequent.
It is of utmost importance, more than ever, to speak to and educate our children to avoid these dangerous neighborhoods, but, more than anything, to teach them the consequences of associating with people who are involved in gangs, crimes, drugs and other things that, at the end of the day, leave nothing but pain and suffering.
Bad company only spoils what you, as a parent, have formed and created in your home. Do not let other young people with nothing to do, come to spoil what, with so much work and sacrifice, you have formed.
As parents, we have a great responsibility to inculcate and educate our children with good principles and values so that in adolescence they are young people of benefit. Sadly, today the prisons are full of young people who, for not thinking about the consequences, have gotten into tremendous problems. As parents, it is too late to help them. The time is now, and particularly for the little ones, as they need of our time, but quality time.
It is sad, but studies have revealed that parents now devote, on average, 8 minutes of daily quality time for their children, then sadly we go around complaining about the actions of our children. We should not delegate our responsibility to the babysitter, but even the nanny of many children is the monster of an eye; «Television». And what does television teach them? Mostly violence, immorality, drugs … and the list is long.
Every week we publish news of great pain and sadness where young people ruin their lives and get into serious problems with the law. Let’s not look at these things as one more story, let’s act now and help our children become mature and righteous as they grow.
Many parents make the mistake of saying, «I do not want my child to feel pressured.» Well, one thing you can be sure of: if you, as a parent, do not push them to be good children, be sure that their friends and street criminals will pressure them to do things that later we will regret for not instilling good values.
Do not let the next bad news be of one of our children, let us do something about the matter starting now.
