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Tucson (AZ), 20 feb (ELINFORMADORUSA/EFEUSA).- Miembros de la comunidad y líderes religiosos dieron su apoyo en Tucson, Arizona, a Jesús Reyes, líder de los jornaleros del Centro de Trabajadores del sur del estado, quien enfrenta una posible deportación.
«Estamos muy preocupados ante casos de inmigración como el de Reyes, que había sido cerrado y de pronto es abierto nuevamente bajo la administración Trump», dijo a Efe, la reverenda Alison Harrington, de la Iglesia Presbiteriana del Sur.
«Creo que es una forma más de aterrorizar a nuestra comunidad», subrayó Harrington en las afueras de la Corte de Inmigración en Tucson, donde hoy Reyes tuvo su primera presentación.
La líder religiosa indicó que a través de toda la nación se están viendo cada vez más casos de personas como Reyes, a quienes bajo la administración Obama se les cerró casos migratorios bajo el proceso conocido como «prosecutorial discretion», porque no eran prioridad para una deportación.
«Ahora vemos que estos casos están siendo reabiertos sin motivo (aparente) alguno», remarcó Harrington.
Doralina Luna, abogada que lleva el caso de Reyes, dijo a Efe que una situación como esta refleja la realidad que muchas personas están viendo a través de la nación.
«Esta es la consecuencia de la orden que dio el Exfiscal General, Jeff Sessions para que se reabrieran este tipo de casos», dijo la abogada.
También la jurista indicó que personas como Reyes, quien lidera a un grupo de jornaleros en el sur de Tucson, ya demostraron a la corte de inmigración que contribuyen a sus comunidades y que tienen lazos familiares en este país.
Por el momento, Reyes no dio comentarios a la prensa por recomendación de su abogada.
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