Por Edgar Castro/LANSING, MI (ELINF).-
La compañía Enbridge presentó una demanda federal en busca de una orden judicial para evitar que el estado de Michigan tome cualquier medida para cerrar los ductos duales de la Línea 5 en el Estrecho de Mackinac.
A principios de este mes, la gobernadora Gretchen Whitmer explicó que Enbridge ha violado «repetidamente» la Servidumbre de 1953 y que la operación continua de los oleoductos viola las necesidades energéticas del estado. Por su parte, Enbridge sostiene que la Administración de Seguridad de Tuberías y Materiales Peligrosos es su regulador de seguridad, no el estado de Michigan. Enbridge afirma que la seguridad de las tuberías dobles fue revisada por PHMSA y se encontró que eran «aptas para el servicio».
«El intento del Estado de asumir el rol de regulador de seguridad a través de su aviso que pretende» terminar y revocar «la operación es inapropiado e ilegal», señaló Enbridge en un comunicado.
“Ante los continuos obstáculos de esta Administración, es hora de que el Estado deje de jugar a la política con las necesidades y ansiedades energéticas de los consumidores y empresas estadounidenses y canadienses que dependen de la Línea 5”, destacó Vern Yu, vicepresidente ejecutivo y presidente de Líquidos Oleoductos. “Es preocupante ver que la Administración actual está dispuesta a comprometer estas necesidades. Seguimos sumamente comprometidos con la protección de los Grandes Lagos, el medio ambiente y todas las personas que utilizan estas aguas, al tiempo que suministramos la energía de la que la gente depende a diario. La Línea 5 de Enbridge ha servido a los habitantes de Michigan de manera segura sin derramar una gota de petróleo en el cruce del Estrecho durante más de 65 años, en nueve administraciones estatales diferentes», puntualizó.
“Aquí en Michigan, los Grandes Lagos definen nuestras fronteras, pero también definen quiénes somos como personas. Enbridge se ha negado habitualmente a tomar medidas para proteger nuestros Grandes Lagos y los millones de estadounidenses que dependen de ellos para obtener agua potable limpia y buenos trabajos. Han violado repetidamente los términos de la servidumbre de 1953 al ignorar los problemas estructurales que ponen en riesgo a nuestros Grandes Lagos y a nuestras familias”, resaltó la gobernadora Whitmer a principios de este mes. “Lo más importante es que Enbridge ha impuesto a la gente de Michigan un riesgo inaceptable de un derrame de petróleo catastrófico en los Grandes Lagos que podría devastar nuestra economía y forma de vida. Es por eso que estamos tomando medidas ahora y continuaré responsabilizando a cualquiera que amenace nuestros Grandes Lagos y el agua dulce», agregó la mandataria.
«Transportar millones de galones de productos petrolíferos cada día a través de dos oleoductos de 67 años que se encuentran expuestos a lo largo de todo un canal de transporte transitado presenta un riesgo extraordinario e inaceptable», comunicó la oficina de la gobernadora. «Los ductos duales son vulnerables a golpes de ancla, impactos peligrosos similares y los riesgos inherentes de las operaciones del ducto», concluyeron las autoridades.