Por Héctor Loya/GRAND RAPIDS, MI
Ha comenzado la semana de seguridad de regreso a la escuela analizando la salud mental de los estudiantes en relación con la ansiedad y también el pensamiento de los padres por la seguridad de su hijo.
Es común que todos los años los estudiantes e incluso los padres se sientan nerviosos durante el regreso a clases, pero este año, los médicos advierten que la ansiedad ha vuelto.
Eso es después de las tragedias y masacres cerca de casa y en todo el país el año escolar pasado, además de los efectos de la depresión y el aislamiento por el COVID-19.
Al final del año escolar pasado, el tiroteo traumático en Uvalde, Texas y el tiroteo en la escuela Oxford aumentaron los nervios.
Los médicos advierten que los especialistas en psicología y psiquiatría proveedores de salud están viendo un aumento y, aunque es bueno que la gente se comunique, también es preocupante que la comunidad esté teniendo una necesidad significativa relacionada con la ansiedad y la depresión.
Algunas señales de advertencia para los padres de familia pueden ser:
∙ Dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido demasiado tiempo.
∙ Falta de energía o interés en sus actividades favoritas.
∙ Cambios en el apetito y, a veces, comportamiento gruñón.
Según expertos a veces, la ansiedad en realidad se manifiesta más como ira e irritabilidad. Entonces, algunos niños parecen estar molestos o realmente frustrados todo el tiempo, o se enojan con mucha facilidad.
Si usted, como padre, se siente ansioso, los médicos recomiendan buscar ayuda para que sus hijos no se den cuenta de los pensamientos ansiosos. Hable con sus hijos hoy sobre lo que los pone nerviosos y, después de eso, practique un poco su rutina de regreso a la escuela.
