Por Edgar Castro/ROCKFORD, MI
Las autoridades de Michigan suspendieron la licencia de un hogar de cuidado infantil en Rockford luego de las quejas de que el propietario encierra a los niños dentro de las tiendas de campaña durante la siesta con candados pequeños. El Departamento de Licencias y Asuntos Regulatorios de Michigan (LARA) informó que suspendió sumariamente la licencia de hogar de cuidado infantil grupal de Connie Rookus.
De acuerdo a la información revelada, Rookus ha operado un hogar de cuidado infantil grupal en Young Avenue en Rockford desde 2021. El 1 de febrero de 2023, LARA indicó que recibió una denuncia de que Rookus encerró a los niños dentro de las tiendas durante la siesta usando pequeños candados en el exterior de las tiendas para que los niños no pudieran salir. La denuncia también señala que Rookus estaba solo con 13 niños el 1 de febrero y colocó a los bebés en asientos inflables dentro de los patios de juegos y los cubrió con sábanas.
Según LARA, Rookus admitió el 3 de febrero que colocó a los niños en tiendas de campaña para niños y los encerró. Rookus informó que normalmente quitaría las cerraduras antes de permitir que los padres recorrieran la casa. De acuerdo a LARA, Rookus admitió que conocía que encerrar a los niños en tiendas de campaña estaba mal, pero no pensó que fuera abusivo.
Además, se conoció que encerraba a 5 o 6 niños individualmente dentro de las tiendas. Rookus argumentó que hizo esto porque era más fácil encerrarlos para garantizar su seguridad y saber que no estaban destruyendo cosas. El 6 de febrero, una consulta de licencias completó una inspección no anunciada en el hogar y encontró a dos niños menores de 12 meses con un biberón lleno dentro de patios de juegos separados. Los patios de juegos estaban cubiertos con cerramientos de tela.
Durante la visita, Rookus admitió que había encerrado a niños en tiendas de campaña durante los últimos dos o tres años. LARA suspendió sumariamente la licencia de Rookus a partir de las 6 p. m. del 8 de febrero.
Actualmente, Rookus tiene siete días, a partir de la fecha de suspensión, para apelar la inhabilitación sumaria y asistir a una audiencia administrativa.
