GRAND RAPIDS, MI (ELINF)
Aunque esta semana se han presentado algunas lluvias muy necesarias, la ciudad de Grand Rapids pide a los residentes complementar las lluvias recientes regando sus árboles. Grand Rapids tuvo solo el 20 por ciento de las precipitaciones normales en mayo y se espera que junio sea al menos igual de seco. La división forestal de la ciudad indica que las condiciones secas, especialmente a principios de la temporada de verano, pueden tener efectos devastadores en los árboles y otras plantas del paisaje.
El agua ayuda a los árboles a pasar los calurosos meses de verano con menos estrés. Los árboles más jóvenes o recién plantados corren mayor riesgo, pero incluso los árboles establecidos más grandes se beneficiarán del agua suplementaria. Si bien los residentes deben considerar la conservación del uso del agua, regar los árboles puede ayudar a mantener el dosel de los árboles, ayudar a limpiar el aire, absorber los gases de efecto invernadero/carbono, brindar sombra, reducir el efecto de isla de calor/las temperaturas y crear aire respirable.
Las ciencias forestales ofrecen los siguientes consejos para ayudar a los árboles a sobrellevar las condiciones de sequía:
- Los árboles tienen raíces más profundas que el césped. Se necesita un riego lento y constante para alcanzar las raíces de los árboles.
- Para árboles grandes o establecidos, riegue debajo de la copa del árbol moviendo la manguera o el rociador cada pocas horas.
- Para árboles recién plantados, riegue a fondo el cepellón y el suelo circundante.
- Reduzca el flujo si se ve que el agua sale del sitio.
- Si no usa una manguera, un balde de cinco galones con un agujero de 1/16 de pulgada perforado en el fondo hará que el agua gotee lentamente hacia el suelo. Puede tomar varios rellenos para árboles más grandes.
- Excava de seis a nueve pulgadas para verificar la humedad del suelo. Continúe regando si los suelos no están saturados.
- Repita el riego periódicamente hasta que regresen las condiciones climáticas normales. El tipo de suelo, la pendiente, la cantidad de sol y la temperatura afectarán la frecuencia con la que se requiere agua adicional (p. ej., suelos arenosos requieren riego más frecuente que los suelos arcillosos).
- El marchitamiento y la caída de hojas son respuestas naturales al estrés por sequía. ¡No te desanimes! Sigue agregando agua y tu árbol debería recuperarse.
