“Su cómplice “Cucaracha”, enfrenta cargos de perjurio”
Por Joel Morales
El Informador
GRAND RAPIDS, MI
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Mujey Dumbuya, de 16 años de edad, quien era estudiante de la escuela secundaria Kentwood, desapareció en Grand Rapids el 24 de enero del presente año. Cuatro días después, su cuerpo semidesnudo fue hallado sin vida en la ciudad de Kalamazoo.
El pasado viernes 8 de junio, varios agentes de la ley, expertos forenses y testigos en la desaparición de la joven. Incluso Fatmata Corneh, madre de la difunta testificaron en la audiencia preliminar de los acusados en la Corte del Distrito 61 en Grand Rapids.
Después de más de siete horas de testimonios y 15 testigos, la juez Jennifer L. Faber encontró que existía causa probable que Quinn James, de 43 años de edad, de Wyoming y Gerald Bennett, de 58 años, de Detroit, conocido por el apodo “Cucaracha”, pudieron haber cometido el homicidio, mandando el caso a juicio.
Corneh testificó que el 23 enero, un día antes de su desaparición, fue la última vez que vio a su hija. Las últimas palabras hacia ella fueron “Adiós mamá”, cuando salió de la casa rumbo a la parada del autobús.
La madre también describió la ropa que la joven llevaba puesta antes de desaparecer, conmoviéndose al ver varias imágenes de la joven en una pantalla en la corte (imágenes que El Informador pudo ver pero que no vamos a publicar porque son muy fuertes, siendo el único medio de comunicación en español físicamente presente en la audiencia), quien a la vez tuvo que ser escoltada del salón de corte de la juez Faber, entre lágrimas.
El policía Timothy Knight, del Departamento de Seguridad Pública de la Ciudad de Kalamazoo, testificó que dos estudiantes de la universidad Western Michigan, fueron los que dirigieron a la policía a un área bosquejada en la cuadra 800 de la avenida Prairie, cerca de la calle Blakeslee, donde encontraron a Dumbuya entre las hojas, un abrigo color negro cubriendo sus manos, sus pantalones de mezclilla alrededor de sus rodillas, mostrando una playera y ropa interior blanca.
Gary Latham, también integrante del departamento de policía de Kalamazoo, testificó que el cuerpo de la joven estaba a unos 120 pies de la calle y una loma. También encontraron huellas de pies, los rastros de neumáticos de una bicicleta cerca de donde estaba el cadáver de la fallecida e incluso el ADN de James en sus pantalones de mezclilla. Así mismo, una sustancia blanca en su abrigo que parecía ser cloro, ropa interior y una gorra azul que llevaba puesta.
Bennett, quien enfrenta cargos de perjurio y acusado de haberle ayudado a James a disponer del cuerpo de Dumbuya, la mayor parte del tiempo en la audiencia, mantuvo su cabeza agachada, sus piernas cruzadas a la orilla de una mesa donde estaba sentado junto a su abogado. Mientras que el principal acusado de la muerte (James) estuvo muy activo, tomando notas, revisando documentos, conversando con su abogado y hasta observando quien entraba y salía de la corte, en varios instantes hizo contacto directo con las cámaras de El Informador.
Dumubya, quien había alegado que James la había violado varias veces, estaba a punto de testificar en contra del hombre cuando desapareció. Un integrante de forense de la universidad de Western Michigan condujo la autopsia de la difunta, y explicó que la joven murió de asfixia y estrangulación.