Los Ángeles, 4 dic (ELINFORMADORUSA/EFEUSA).-
El primer arresto se dio el pasado domingo cuando un avión del Departamento de Seguridad Interna (DHS) observó a un barco sospechoso que entraba en aguas estadounidenses procedente de México.
Tras recibir la información, las autoridades de inmigración lograron interceptar la embarcación en Point Loma, California, a pocas millas de la frontera con México.
En esa nave viajaban en total 21 personas de entre 19 y 59 años. Cuatro de ellos fueron identificados como los presuntos contrabandistas, de los cuales dos son ciudadanos estadounidenses: un hombre de 39 años y una mujer de 21, según las autoridades.
El segundo operativo ocurrió este lunes cuando una pequeña embarcación fue detectada a 13 millas al oeste de San Clemente, en el propio estado.
Una persecución se desató en el mar, y la «panga» alcanzó las playas de San Clemente, donde, al desembarcar, más de una docena de extranjeros intentaron huir a pie.
Trece extranjeros fueron detenidos, de ellos, nueve identificados como adultos mexicanos, dos como menores de edad también provenientes de México y dos adultos chinos.
Al menos un extranjero logró huir.
En un comunicado, CBP subrayó que todos los capturados «estaban decididos a permanecer en el país ilegalmente».
«Con condiciones climáticas adversas y tormentas que se aproximan, el contrabando en el dominio marítimo aumentará los peligros en el mar y en la costa», dijo en el comunicado el jefe de CBP, del Sector San Diego, Douglas Harrison.
«Como he dicho antes, no vale la pena poner tu vida en manos de contrabandistas explotadores e inconscientes», alertó.
Por otra parte, en Texas, la oficina de CBP dijo hoy en un comunicado que durante el reciente fin de semana festivo se arrestaron a 35 inmigrantes que intentaron ingresar al país de forma indocumentada. También durante ese trasiego se detuvieron a 9 presuntos traficantes de personas.
Entre los detenidos se encuentran migrantes de México, Ecuador, Honduras y El Salvador.