Chicago (EFE)
La mayoría republicana en el Capitolio estatal de Wisconsin bloqueó este jueves el intento del gobernador, el demócrata Tony Evers, de conceder licencias de conducir y matrículas universitarias reducidas para indocumentados. La iniciativa de restablecer el permiso de manejo para los inmigrantes sin estatus migratorio legal partió del propio Evers, que la incluyó por segunda vez consecutiva en el presupuesto estatal, pero no consiguió pasar el filtro de la comisión de finanzas de la Asamblea Legislativa.
El gobernador Evers también quería incluir en el presupuesto, y también fue rechazada, una cláusula que daba igualdad a todos los jóvenes en el pago de la colegiatura en las universidades estatales, sin importar su estatus migratorio. Wisconsin emitió licencias de conducir hasta el año 2007 sin exigir el número de seguro social o preguntar por el estatus migratorio, pero dejó de hacerlo al entrar en vigencia las exigencias de seguridad contempladas en la ley REAL ID.
El restablecimiento del documento beneficiaría de inmediato a unas 32.000 personas, de las cuales 22.000 trabajan en granjas e industria lechera, que dependen en gran medida de la mano de obra inmigrante. Activistas de Voces de la Frontera protestaron este jueves en el Capitolio de Wisconsin contra este nuevo bloqueo de la mayoría republicana. «La mayoría republicana mantiene la política antidemocrática y de odio de Donald Trump», declaró a Efe la activista Christine Newman-Ortiz, quien concurrió al Capitolio en la ciudad de Madison junto a otras 200 personas que desplegaron pancartas y carteles.
«En tiempo de pandemia, deberíamos estar agradecidos de las contribuciones de los trabajadores inmigrantes y sus familias, en especial de los trabajadores agrícolas», señaló. Los activistas no fueron autorizados a participar en la sesión de la comisión de finanzas, donde se iba a dar la luz verde para que el plenario de la asamblea votara más tarde el bloqueo de la iniciativa. Eduardo Perea, inmigrante y trabajador esencial, dijo durante la protesta que la falta de licencias dificulta la rutina diaria de las familias, que además son discriminadas cuando buscan empleo y no pueden desplazarse.
«Pedimos la oportunidad de continuar trabajando de manera segura y mejor», agregó. Actualmente se conceden licencias de conducir a indocumentados en el Distrito de Columbia y quince estados, entre ellos Nueva Jersey, que comenzó el 1 de este mes a otorgar este permiso.
