KENIA
Activistas y defensores de los derechos humanos han advertido que tras el cierre de escuelas por la pandemia de COVID19, muchas menores de edad corren peligro de ser casadas por sus familiares, presuntamente para poder obtener alimento en medio de las dificultades generadas por la crisis mundial de salud.
En una aldea masái, ubicada al suroeste de Kenia, una niña de 12 años fue obligada a contraer matrimonio. La menor de edad le dijo a su padre que quería seguir estudiando, no obstante su padre le dijo que ya era muy grande para ir a la escuela. De tal forma, su padre la obligó a casarse con un hombre de 51 años.
“No lo conocía y no lo amaba. Le dije a mi familia que no quería al hombre, pero mi padre dijo que ese hombre podía alimentarnos y que me casaría con él”, relató. La menor citó las palabras de su padre, que le habría dicho: “Las niñas nacen para que la gente pueda comer. Lo único que quiero es conseguir mi dote“.
Desesperada, la menor de edad huyó de su casa; no obstante, sus primos la encontraron y, posteriormente, la golpearon por “haber deshonrado a la familia”. Luego la entregaron a un hombre que ofreció a la familia una dote de cuatro vacas para casarse con ella. Durante dos semanas la menor de edad vivió con ese hombre, posteriormente, escapó con un sujeto de 35 años. Por su parte, las autoridades fueron informadas sobre este caso y buscaron a la menor de edad.
Las autoridades se han dedicado a buscarle un refugio a la menor, mientras que arrestaron a su padre y las personas involucradas en su “boda”. Tanto su padre como sus maridos enfrentan penas carcelarias. Estudios revelados por activistas indican que las bodas entre niñas, menores de edad y adultos han aumentado tras el cierre de escuelas para evitar tanto la dispersión como el contagio del Coronavirus.