El ladrón fue identificado como Dylan Joel Nicolás Escudero, de 19 de años, y aparentemente al notar que el domicilio se encontraba sin ocupantes pensó que robar era cosa sencilla. Su ingreso al lugar lo hizo escalando una barda de aproximadamente dos metros que se encontraba por el antejardín.
Sin embargo, en cuanto toco tierra fue descubierto por dos perros raza pitbull que custodiaban la propiedad e inmediatamente lo atacaron provocándole lesiones de seria consideración. Los vecinos del lugar llamaron a las autoridades alertados por los gritos de sufrimiento del joven.
Al llegar al lugar los agentes del orden al no poder detener a los perros decidieron ultimarlos a tiros para que dejaran al ladrón. Inmediatamente el joven mal herido fue trasladado a un hospital pero en el trayecto perdió la vida debido a las mordeduras de los canes.
El hecho ha generado una gran cantidad de opiniones divididas entre las que resalta que la policía no debió de matar a los dos perros puesto que sólo estaban protegiendo su hogar y la responsabilidad total es del joven que intentó cometer un delito.