Por Héctor Loya/ El Informador
GRAND RAPIDS, MI.- El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Michigan notificó al Departamento de Salud del Condado de Kent que la variante COVID-19 conocida como SARS-CoV-2 B.1.1.7 ha sido confirmada en un residente del condado de Kent.
Esta variante es preocupante porque está asociada con una mayor transmisibilidad. Comparado con el original, la variante B.1.1.7 es aproximadamente un 50 por ciento más transmisible, lo que conduce a una propagación más rápida del virus y un número potencialmente creciente de casos, hospitalizaciones y muertes.
La presencia de la variante de propagación rápida en el condado de Kent ilustra la importancia de mantenerse alerta en el prevención de la propagación de COVID-19. Uso adecuado de la mascarilla, distanciamiento social y buena higiene de manos siguen siendo las medidas más eficaces para combatir la propagación de la enfermedad.
El KCHD también alenta a los residentes a limitar sus interacciones con las personas que viven fuera de sus propios hogares.
“Fundamentalmente esta es una carrera por la cobertura de nuestra población; una carrera que enfrenta los esfuerzos de vacunación contra la transmisión de infecciones”, dice el Dr. Adam London, Director de KCHD. “Mientras trabajamos para minimizar el impacto de las infecciones por COVID-19, la variante B.1.1.7 está dando al virus una mayor velocidad».
El KCHD está alentando la realización de pruebas a las personas que han viajado fuera de Michigan en los últimos 14 días, especialmente en áreas en las que las nuevas variantes están circulando ampliamente.
Se cree que la variante SARS-CoV-2 B.1.1.7 surgió en el Reino Unido y desde entonces ha sido detectado en muchos países y estados. El MDHHS ha identificado 30 casos de la variante B.1.1.7 en Michigan.
Si bien la mayoría de estos casos se han encontrado en la parte sureste del estado, la reciente confirmación de un caso en Kalamazoo y ahora en el condado de Kent ilustra la naturaleza de rápido movimiento de la variante.
