Crispín Garrido Mancilla / Infonort News Agency
Aún para quienes hablan poco inglés, describir síntomas y entender términos médicos puede ser una pesadilla, por lo que casi terminan confesando sus dolores a un intérprete, lo cual en ocasiones termina siendo más incómodo que la propia enfermedad.
En muchos casos, los médicos o enfermeras se desesperan porque el paciente no entiende las preguntas o indicaciones, o corren el riesgo de hacer un mal diagnóstico por la barrera del idioma.
Indicaciones sencillas como la limpieza de una herida o dieta a seguir, suelen convertirse en un drama entre un médico que sólo habla inglés y un paciente que habla español.
Debido a las diferencias en la alimentación y los hábitos de vida, los latinos son propensos en diferente forma a enfermedades, por lo que a los médicos anglos se les complica entenderlas y tratarlas.
No se diga de los costos de acudir a una sala de urgencias, u obtener una cita en la clínica autorizada por la aseguranza, la cual puede tardar semanas.
Por todo esto, muchos latinos prefieren aguantarse los dolores, automedicarse o acudir a charlatanes que ofrecen curas milagrosas para evitar ir a un consultorio u hospital, máxime, si no cuentan con los documentos migratorios en regla.
Lo que pocos saben es que sin tener que salir de casa ya podrán contar con un adecuado cuidado de su salud, con médicos que los entienden en su sentir e idioma y que no les costará nada, ya que el costo es cubierto por las aseguranzas privadas o servicios de Medicare o Medicaid.
Se trata de Telemedicina, un servicio que desde hace más de una década disfrutan en Estados Unidos quienes hablan inglés, pero que es prácticamente desconocido para la comunidad latina.
Esto está por acabar, iniciando para los habitantes latinos del estado de Michigan, donde la compañía Telemedicina Latina inició operaciones, con los mejores médicos, y que posteriormente se extenderá a todo el país.
La telemedicina es un sistema que funciona igual que un call center, debidamente verificado y autorizado por el gobierno, en el que quienes atienden las llamadas son doctores con quienes los pacientes pueden consultar los síntomas de un 70 por ciento de enfermedades y están capacitados para auscultados a través de la cámara remota de un teléfono celular o computadora.
Los doctores de Telemedicina Latina están capacitados para extender la receta y hacerla llegar a la farmacia más cerca al domicilio del paciente. Por si fuera poco, los pacientes también podrán adquirir suplementos en el sitio de internet www.telemedicinalatina.shop, totalmente en español, y pagarlos electrónicamente, al igual que la consulta.
Con esto, los latinos pueden disfrutar beneficios como flexibilidad de horarios en el día para llamar por teléfono y hacer una consulta, no tener que perder un día de trabajo e, incluso, tener acceso a un doctor en algunos casos de emergencia, como el riesgo de un derrame cerebral.
Se acabarán los problemas de desplazamientos hasta el consultorio o el hospital para los latinos que trabajan en zonas rurales o tienen problemas de salud que limitan su movilidad.
Incluso quienes sienten temor de acudir al doctor por carecer de estatus migratorio, podrán atenderse sin tener ir a la clínica asignada por su aseguranza, con la seguridad de que ésta les reembolsará sus gastos médicos.
Telemedicina Latina cuenta con el número: 888-TELEMED, al cual pueden marcar, de entrada, los latinos de Michigan, para pedir informes y darse de alta en el servicio.