Durante la conferencia matutina desde Palacio Nacional Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), minimizó el impacto del anuncio de Donald Trump, de negar la entrada al país a todos los solicitantes de asilo debido a la crisis del coronavirus, implicando que muchos de los que iniciaron el trámite permanezcan en México.
La medida se aplicará tanto en la frontera con México como en la de Canadá y permitirá a Estados Unidos expulsar del país a los migrantes indocumentados sin ningún periodo de detención, ni el debido proceso.
Ebrard puntualizó que se tomó esta medida por la emergencia sanitaria internacional y “no admitirán a las personas que están llegando todos los días de manera indocumentada».
En el caso de los migrantes mexicanos que sean regresados «de inmediato» serán atendidos al ser del propio país. Y lo mismo sucederá con los centroamericanos a quienes desde hace meses se les permite permanecer en la frontera norte de México en tanto esperan presentarse en una para pedir asilo.