Editorial por Héctor Loya
Es muy común que al transitar en vehículo por las calles de Michigan cuando menos se espera y de la nada se caiga en enormes baches. Dicha situación ha ocasionado en algunos casos accidentes o daños a las unidades móviles, condición que resulta sumamente desagradable y molesta para los conductores los cuales no pueden hacer más que resignarse y reparar el daño que recibió su vehículo.
Lo peor del caso es que el problema se va agudizando con el paso del tiempo y es que en temporada primaveral surge el deshielo, lo cual favorece a la aparición de estos indeseables huecos en el camino. Además, de esto se le suma la falta de acciones por parte del gobierno para enfrentarlo y darle solución.
En noticias pasadas se dio a conocer que la gobernadora del estado había promovido un aumento de las gasolinas y que dicho impuesto seria a favor de formar un fondo de recursos económicos para atacar dicha problemática, esta es una propuesta que sigue en espera de acciones concretas, ya que hasta el momento solo se ha rellenado el bache o incluso se ha pasado desapercibido.
En un recorrido que realizó personal de la casa editora El Informador se pudo constatar el mal estado en que se encuentran muchas de las vialidades de la ciudad y del estado. También de la molestia de la gran mayoría de la ciudadanía al ver como sus automóviles resultan con daños a causa de esta situación.
En algunas calles y avenida se observan encharcamientos lo cual representa un riesgo para la población debido a que el agua tapa estos agujeros y esto provoca que la gente no los vea y caiga con mayor facilidad en ellos.
Es necesario y urgente que las autoridades emprendan un programa integral para la reparación de las calles que se encuentran en mal estado en todo Michigan, programa de reparación que la ciudadanía demanda de manera insistente y con acciones más concretas que vayan más allá de solo subir los impuestos.
El estado debe dé contar con recursos suficientes para poner en marcha ese tipo de programas dirigido a todas las vialidades que se encuentren en mal estado, no únicamente las avenidas principales que son las que más atención reciben por las autoridades.
La temporada de deshielo está prácticamente por culminar, por lo que será la obligación del estado la de realizar una inspección en cada uno de los caminos de Michigan para así conocer la situación en que se encuentran y proceder a la reparación de aquellas que cuentan con baches lo antes posible y así abatir el problema de las llamadas “malditas carreteras” como lo dijo la gobernadora Whitmer.